El récord
Escrito por su hijo Danny Montoro
Uno de los comentarios favoritos de mi padre es que decir que ha sido capaz de escribir un artículo todas las semanas sin fallar durante mucho más de una década, lo cual dice mucho sobre el aprecio que tiene a sus lectores.
Esta semana problemas de salud impiden que pueda seguir con su preciado récord, récord que la verdad no estoy seguro si se detuvo antes y lo ha olvidado porque, como seguramente dirá, “ser viejo tiene sus ventajas”. Como su hijo (“presunto hijo” diría él), me tomo el atrevimiento de asomarme por aquí para agradecerles el apoyo y entretenimiento que le han dado durante tanto tiempo, estos años están llenos de historias sobre sus viejas y nuevas amistades, reflexiones y divertidos insultos (hechos y recibidos), todo gracias a ustedes.
Papá forma parte de un tipo de persona poco común, siempre pensando en cómo arreglar los problemas a nivel macro de esos que al solucionarse cambiarían para bien la vida de muchas personas, y mucho más raro aún, él es de los que no se queda solo en palabras si no que participa y organiza activamente para que se logren los objetivos, porque “solo hablar del problema no lo soluciona, aunque lo hagas todos los días”.
Venezuela está inmersa en una dictadura donde la base republicana de separación de poderes ha dejado de existir, para hacer lo que el dictador diga que se haga y se permita lo que él decida, costoso es para la nación mantener esta cadena del rey con delirios de superhéroe y la oligarquía del enchufe, que solamente por su incapacidad en la producción petrolera nos cuesta 90.000 millones de dólares al año, a lo que debemos sumarle todo lo que supone el drenaje que hacen a las arcas del estado.
En este momento tan difícil para nosotros, donde la salud de un familiar supone un duro golpe, no solo emocional sino también económico, no podemos dejar de pensar como países con muchas menos oportunidades han sido capaces de construir un sistema de salud universal donde sin importar tu ingreso recibirás la mejor atención médica posible.
La atención médica mínimamente decente de Venezuela está totalmente fuera de las posibilidades de la gran mayoría de sus ciudadanos, la salud es una necesidad básica que personalmente pongo por delante de la educación, pero que como país no le hemos dado la importancia que se debe incluso en épocas anteriores, normal era ver entonces a venezolanos pidiendo dinero para una operación o medicina a personas que se encontraban llenando el tanque de sus camionetotas de lujo con gasolina subsidiada casi en su totalidad por el estado.
La salud debe ser un objetivo común tratado con la seriedad y respeto que se merece y no un tema de publicidad política, aparentar que mejoraban la salud trayendo médicos de atención primaria de otro país (la mayoría de las veces sin siquiera proveerles de medicinas), representó mucho más dinero del que hubiese significado poner en orden las estructuras hospitalarias existentes y construir las que faltaban.
La importancia ha estado centrada en el aparentar que se hace, donde es normal la ridiculez de hacer un ambulatorio nuevo cerca del hospital al que no se le proveen ni siquiera de los materiales más básicos, y que tiene como única justificación mostrar la foto del gobernante y su logo personal porque “dio” los recursos para construirlo, como si el dinero lo sacara de su bolsillo y no del nuestro, ¿Cuántas vidas nos habrá costado esa publicidad?, ¿Cuántas de estas construcciones se encuentran ahora inservibles?.
¿Cuántas veces hemos visto a gobernantes orgullosos mostrando la rehabilitación de algún área hospitalaria cuando ellos mismos, responsables de su mantenimiento y dotación, la llevaron a la ruina? ¿Cuántas veces hemos visto a gente agradeciendo al gobernante “tal” por “ayudar” con unas medicinas?, sin darse cuenta que son víctima del clientelismo político al recibir un derecho que deben tener solo por ser humano.
Terrible es que la pensión sea menos de 10$ mensuales, y aún más es pensar que un jubilado debe con eso cubrir además el costo de atención médica y medicinas.
Indudablemente que un cambio de rumbo es urgente, la oposición al menos se ha trazado el camino de elegir un candidato que enfrente a la dictadura en una elección para el 2024, camino que apoya mi padre.
Yo veo a un dictador que se siente orgulloso de ser dictador, tanto como para que su “superpoder” sea tener una mano de hierro, lo veo construyéndose de nuevo su falsa oposición (sin nombrar al bolsa del lápiz) que acepte prontamente su derrota en la elección absurdamente amañada, nada que no hayamos visto antes, pero también creo que es indispensable que los intentos de retornar a la democracia sientan el apoyo de todos, hay una nación entera llena de necesidades por atender y todas las soluciones pasan primero por el fin de la dictadura de superbobote y todo el que trabaje en esa dirección tendrá mi apoyo.
Que pronto retorne el escritor que aprecian
Así lo esperamos sus hijos (“presuntos todos”) y su esposa con la que tiene el récord de soportarse el uno al otro durante más de 48años.
PD: Después vemos cómo arreglamos lo del récord de los artículos, que haga varios en una semana, o nos hacemos los locos, igual todos vamos para viejo y los detalles se olvidan.