Hasta $10 por reconectar el servicio si no pagas en 5 días: la multa “vil y ruin” de Cantv
Un aumento sin precedentes. Esa es la denuncia que se ha viralizado en redes sociales respecto al servicio de Cantv, la operadora estatal de telecomunicaciones, que ha comenzado a cobrar hasta $10 o 55 bolívares por reconexión. Esto, si no se paga la mensualidad en menos de cinco días a partir de la fecha de emisión de la factura.
Un par de denuncias llegaron a la redacción de ND esta semana. La primera es de un vecino del este de Caracas a quien, a pesar de que tiene más de dos años sin teléfono ni ABA (el servicio de internet de Cantv), le sigue llegando la factura mensual.
En su última revisión, se percató de que el monto que usualmente cancela había incrementado notablemente. Sucede que, de acuerdo con las nuevas políticas de la empresa, solo hay cinco días para pagar la factura mensual, de lo contrario, habrá desconexión o una suerte de “multa” que puede llegar a los 55 bolívares o 10 dólares estadounidenses, según sea el caso.
Otro caso similar fue en el oeste. Una señora. Ella tuvo que pagar 76,49 bolívares, mucho más de lo que vale la renta por el plan de Cantv que utiliza (34 bolívares). Al revisar, también se percató de que fueron sumados más de 25 bolívares, como penitencia por no pagar a tiempo.
Si se ahonda en redes sociales, varias son las denuncias similares. Es el caso de Álvaro Peña, quien en Twitter criticó que recibió una llamada de Cantv, donde amenazaban con cortar el servicio si no pagaba su deuda, superior a los 100 dólares. Pero, según dijo, él tiene ya cinco años sin conexión.
El licenciado Osvaldo Sayago también hizo eco de la denuncia y en la misma red social criticó:
“Develado el secreto de Cantv: el flamante concepto que te aparece en tu facturación como «Actividades de Telecomunicaciones», corresponde a la reconexión del servicio, que ahora en tiempos de ROBOlución se redujo drásticamente”.
Mario Segovia, otro usuario de Twitter, criticó que “ahora tienes 5 días después del corte de tu facturación para cancelar, sino te cortan el servicio y debes pagar $10 de reconexión”.
“Pero duras 5 o 6 meses o más pagando un servicio que no funciona por avería y no te reconocen esos pagos no disfrutados”, repudió.
No hubo mayor aviso
Lo que más llama a la denuncia es el poco –o nulo- aviso que hubo para este cobro, más allá de un cuadro que establece las fechas de pago para cada usuario, que dependen del último número del teléfono registrado en el servicio:
De acuerdo con el cuadro dispuesto por Cantv, en efecto solo se dan cinco días para generar el pago, que puede realizarse a través de las plataformas bancarias adscritas al sistema, por ejemplo.
Lo que no informan es que habrá un importe por reconexión que, para el economista Manuel Sutherland, es un “disparate” y un acto “ruin y vil” por parte de la estatal, pues, por ejemplo, compromete el 40% de la pensión de un adulto mayor que haya olvidado cancelar la tarifa a tiempo.
“La Cantv debería avisar a las personas con bastante antelación, mandar mensajes de texto, correos, con la fecha que cada persona debe pagar y además de eso, dar un plazo normal para poder cancelar el servicio”, explicó Sutherland, en conversación exclusiva con ND.
A su juicio, hubo un “aumento muy brusco” en las tarifas, pues esa empresa, nacionalizada en 2007, “tenía muchos años cobrando ‘nada’, y comenzó a cobrar un monto importante para quienes devengan salario mínimo”, que es de apenas $25, según el tipo de cambio oficial.
“Entendiendo eso, deberían dar más plazo y menos presión para pagar, además de que 10 dólares es costoso y no tiene sentido, no es una reconexión manual, es un sistema que se actualiza. Eso me parece un exceso, un abuso y una cuestión que no tiene el más mínimo sentido, porque los pensionados ganan alrededor de 25 dólares. ¿Le vas a quitar casi el 40% de su pensión a una señora que se le olvidó pagar el día del corte? Eso no tiene sentido y es un disparate total”, criticó.
No corresponde
En 2007, cuando Chávez nacionalizó la Cantv, dijo que convertiría la empresa en una compañía socialista, “con todos los motores encendidos al servicio del desarrollo integral de la nación y de la construcción de la Venezuela socialista”.
15 años después, Cantv es un servicio altamente criticado. Sutherland manifiesta que existen “miles de denuncias por averías y falta de servicio”, y desde la empresa “no reparan, no mejoran, no dan respuesta a las solicitudes de reparación”. “Y es un servicio que la mayoría de las personas considera que es sumamente malo”, añadió.
Un ejemplo de esto es la señora citada al inicio de esta nota, del oeste de Caracas. Ella y sus vecinos cuentan con el servicio desde hace tres meses, pero no porque Cantv haya mandado el personal calificado, sino porque en su comunidad decidieron recurrir a la informalidad.
Según nos costó, un técnico de la empresa, aparentemente jubilado, ofreció sus servicios de reparación y, entre todo el condominio, decidieron pagarle para que arreglara el cableado, dañado por los años y la falta de mantenimiento. Les vino bien, porque varios apartamentos tenían por lo menos 2 años sin teléfono ni internet, precisó la señora.
Sutherland sugiere que no sabe si el cobro del servicio, que en teoría podría usarse para mantenimiento e inversión, distorsione la visión del mandatario fallecido. Solo insiste en decir que es un “timo” a la sociedad venezolana.
“No se debe cobrar el mismo importe por reconexión en un servicio que es bastante mediocre, porque, por ejemplo, la velocidad de internet no corresponde con lo que ofrecen y los teléfonos fallan mucho, tienen ruido, problemas. Por eso me parece que es un abuso total”, finalizó.
La sexagenaria comentó que nunca recibieron la visita de los técnicos de Cantv, aun cuando desde el condominio hicieron llamados en conjunto para que repararan la situación, que aparentemente cambiaría con su estatización hace más de una década.
El importe de reconexión de $10, además de ser sorpresivo para los usuarios, genera dudas. Se estimaría que la recolección de fondos promueva el mejoramiento del servicio de Cantv en general, pero la falta de información oficial al respecto, lejos de aclarar, solo llama a la incertidumbre.