Los misterios de la ley antibloqueo
«A la sombra del misterio no trabaja sino el crimen» Simón Bolívar
La protección y confidencialidad que le garantizan la ley antibloqueo a la inversión extranjera en el país no es más que una forma de intentar ocultar los oscuros y sombríos negocios que adelantará el régimen usurpador con los bienes de la nación. Y la «inversión» que harán de los cuantiosos recursos económicos que ingresarán, no al Tesoro Público, sino a una cuenta especial, que crearán para tales fines. Opacidad total.
El argumento según el cual buscarán garantizar a los inversionistas internacionales evadir las sanciones de EEUU pues, nunca podrán enterarse quién o quiénes estarán haciendo negocios con Venezuela, para la explotación del petróleo, oro y diamante, Coltán, es peregrino. Estamos en un mundo globalizado y los servicios de inteligencia de los países desarrollados son tan eficientes que no se mueve ninguna inversión en el mundo que no sea detectada. Ese cuento es chino.
Lo que buscan garantizarse, y les será bien difícil, es el manejo secreto de todos los gigantescos ingresos, los cuales ingresarán a una cuenta separada y su «inversión» será estrictamente misteriosa. El Tesoro Público es uno e indivisible. No habrá control previo y posterior. Es el manejo y «administración» del dinero público, sin la vista del público. No habrá rendición de cuentas. Se despacharán y darán el vuelto.
No hay nada oculto bajo el sol y sobre la tierra. ¿A quién pretenden engañar? Ni Bin Laden pudo escapar de los servicios de inteligencia de EEUU. El secreto por un tiempo será a lo interno hasta que reviente la cloaca de la corrupción y queden como hasta ahora, al desnudo. No han podido, pueden, ni podrán escapar del escrutinio público externo e interno. Todo saldrá a flote en lo que menos piensen. No pasarán lisos.
La opacidad con la cual saquearon al país, hasta ahora, con la monstruosa e inconstitucional ley antibloqueo, pretenden hacerlo en la total oscuridad. No hay un ápice de dudas, que sólo buscan intimidar y perseguir a todo aquel venezolano, que en su derecho ciudadano, exija rendición de cuentas o denuncié la corrupción. Terrorismo de estado, pues.
Los secretos y misterios de la inconstitucional ley antibloqueo les permitirá acusar de traición a la patria a quien o quienes pongan al descubierto los oscuros negocios con los bienes de todos los venezolanos. Está claro. ¿O no? Es el objetivo. El crimen no paga, pero los criminales a la larga, sí. El largo brazo de la justicia siempre los alcanza. Tarde o temprano.