¿Guaidó más allá del 10-E-2021?
«Es preciso preferir la soberanía de la ley a la de uno de los ciudadanos» Aristóteles
Es bueno recordar que la comunidad nacional e Internacional no reconoció la pantomima electoral del 20M-2018. Es más, los que se presentaron a la farsa, durante el desarrollo del proceso, cantaron fraude y gritaron la ilegalidad del evento, porque dizque, le habían dado garantías para la transparencia del proceso y habían sido burlados y engañados. Inocentes los chicos que andan buscando que los vuelvan a engañar ¿Ingenuidad? Yo te aviso chirulí.
En razón de ese hecho, público, notorio y comunicacional, es lógico inferir de que no hubo Presidente electo. Y producido ese vacío, Juan Guaidó, en su condición de Presidente de la legítima AN, tal como lo contempla la Constitución, asumió la Presidencia de la República, en calidad de encargado, hasta tanto se celebren elecciones libres, democráticas, competitivas, con reglas claras y observación internacional calificada. No hay que ser un eminente jurisconsulto para entender esa lógica. Es cuestión de leer algunos artículos de la CNB. Están clarísimos.
Para el 6D-2020, el régimen usurpador convoca un circo electoral, que desde ya, la comunidad nacional anuncia que no está dispuesta a participar en otra farsa electoral y la internacional cuyos voceros lo repiten: no reconocerán ningún evento electoral convocado por el régimen usurpador, persuadidos cómo están de que no hay ninguna garantía de imparcialidad, transparencia y equidad para todos los actores, especialmente, para la verdadera y auténtica oposición.
El juego tiene que tener un árbitro escogido y respetado por todos los participantes. Es una regla inflexible.
El régimen usurpador, de continuar en su empeño de celebrar la farsa electoral del 6D-2020, no logrará ser reconocido por la comunidad nacional e internacional. Entonces, la única institución legítima, hasta tanto no se convoquen elecciones libres, democráticas, competitivas, con reglas claras y con observación internacional calificada, es la AN que preside Juan Guaidó y en consecuencia, continúa, como Presidente (e) de la República, más allá del 10E-2021, hasta que se convoquen legal e institucionalmente, las 2 elecciones pendientes ¿O no?
Es por eso que, sin vacilaciones de ningún tipo, habrá continuidad administrativa y Venezuela sumergida en esta profunda crisis política, económica e institucional, con 2 Presidentes de AN, la legítima que preside Juan Guaidó y la espuria que surgirá de la farsa electoral del 6D-2020 y tendría un Presidente ilegítimo, como la totalidad de ese cuerpo legislativo. Es la triste realidad que se avecina para el país y, como la dictadura, no permite elecciones libres, Juan Guaidó, continuará encargado de la Presidencia de la República, más allá del 10E-2021. No hay otra opción.
Los que quieren entender esta realidad que está frente a sus ojos, la entenderán. Los que, quieran buscar argucias, para prestarse a la farsa electoral, intentar darle legitimidad al régimen usurpador, que pretende saltarse con garrocha la elección presidencial de diciembre de 2018 y oxigenarlo, pueden hacerlo. No les arriendo ganancias y menos espíritu patriótico, pero están en su derecho. En farsas electorales no cae ciudadano enterado y responsable ¿O sí?
Es respetar la soberanía popular y de la ley, o aceptar la ley que impone uno sólo: el usurpador. Ese es el dilema. Particularmente, prefiero la ley de los ciudadanos y el inapelable veredicto del tribunal del pueblo que surge de los votos. Todos queremos participar y votar, pero en elecciones libres. Esa es la verdad.
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