Elecciones para criminales y traidores
Si algo de positivo pudiéramos rescatar de la presente etapa, en medio de la guerra de exterminio socialista contra Venezuela por parte del «Cártel de Los Soles», es precisamente la transparencia en el accionar del Estado Criminal Socialista. Ello en razón quizá de la arrogancia fundada en las carencias de nuestro movimiento demócrata o más bien el efecto lógico de ese estado de alarma que embarga a un régimen denostado por el mundo libre – lo que no es poco decir.
Sea cual fuere la causa, hoy día el socialismo en Venezuela perdió en mucho su capacidad para engañar. Tal es el caso del Poder Electoral y la designación de su CNE.
Es de gran complacencia la brutalidad que caracterizó el proceso expedito del que se valió el TSJ del Cártel de Los Soles para designar a los integrantes del llamado órgano comicial. Lejos quedaron aquellos tiempos cuando el Estado Criminal Socialista cuidaba los detalles para simular imparcialidad por parte de todos y cada uno de los llamados rectores del Consejo Nacional Electoral, siempre designados por un Tribunal Supremo de Justicia leal al socialismo.
Hoy, la obsecuencia socialista de todos y cada uno de los miembros del CNE garantiza la necesaria radicalización de Venezuela, condición indispensable al logro de la liberación nacional.
Por un lado, venezolanos de trabajo, ley y orden, empeñados en la urgente activación del artículo 187 #11 de la Carta Magna, que nos salve de esa muerte segura llamada socialismo, y por el otro, criminales y traidores que aplauden la inminente celebración de comicios fraudulentos, boleto seguro (creen ellos) para la continuación del exterminio y también para el cobro de un justo precio por la venta de un país.
¡Prohibido Olvidar! Ora y labora