Gobierno de Maduro tildó de «sucio» comunicado de la UE que exige actas del 28J
El Gobierno de Venezuela tildó este sábado de “vulgar chapuza” un comunicado de la Unión Europea (UE), en el que el bloque expresó su preocupación por la “profundización de la crisis política” en el país, luego de la decisión de la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) sobre los comicios presidenciales del 28 de julio.
“El irrespeto continuado a la soberanía e independencia de Venezuela y sus poderes públicos por parte de la Unión Europea, se puede convertir en un salto al vacío que afectará de manera considerable las relaciones diplomáticas, políticas y económicas que hasta ahora se vienen desarrollando”, suscribe el comunicado publicado por el canciller Yván Gil en su cuenta de Telegram.
«No toleraremos ningún acto insensato que viole los principios consagrados en la Constitución y el derecho internacional, y apelará a la doctrina bolivariana, anticolonial y antiimperialista que inspiraron las luchas que expulsó del suelo sagrado de la patria a los imperios europeos hace más de 200 años. El sucio comunicado redactado por el Sr. Borrell no solo es una afrenta a la dignidad nacional, sino que es un burdo panfleto que se atreve a reivindicar como válida la estafa del fascismo que difundió documentos forjados y espurios, estos ya han sido desnudados ante la opinión pública”.
Según la administración de Nicolás Maduro, las actas electorales publicadas en una página web por la oposición, “son falsas y simplemente son producto de un plan delictivo en contra del voto popular”.
“El comunicado de la Unión Europea se convierte en una vulgar chapuza que quedará registrada en los anales de la vergüenza diplomática mundial”, agrega.
Además, estimó que las declaraciones del alto representante de la UE, Josep Borrell, “hunden nuevamente al bloqueo en el fango putrefacto, donde estuvieron por mucho tiempo cuando siguiendo el estrafalario experimento fracaso de Juan Guaidó, y son una muestra del odio y complejo de estos funcionarios”.
El oficialismo exige “respeto a su integridad” y exhortó a la UE “a abstenerse de emitir opinión alguna sobre los asuntos que le competen, de manera exclusiva, a los venezolanos”.