Sabrina Veris y su historia como bailarina
Antes de que Sabrina Veris se convirtiera en una figura reconocida de la televisión y las redes sociales, su mundo giraba en torno a la danza. Para Sabrina, la danza no es solo un conjunto de pasos y técnicas; es una forma de expresión que conecta el alma con el cuerpo, un lenguaje universal que trasciende fronteras y que la ha acompañado desde muy joven.
Nacida en San Cristóbal, Táchira, y criada en Caracas desde los nueve años, Sabrina comenzó su formación artística en la academia de la reconocida bailarina Marjorie Flores a los 12 años. “Desde pequeña, sentí que la danza era mi refugio, mi forma de hablar cuando no encontraba las palabras,” confiesa Sabrina. Bajo la tutela de Flores, aprendió que la danza es más que una disciplina física; es una filosofía de vida que enseña resiliencia, pasión y dedicación.
La carrera de Sabrina Veris en la danza comenzó de manera natural. Desde el primer momento que pisó un escenario, sintió que había encontrado su verdadero hogar. A los 17 años, participó en la serie juvenil “La CQ” de Cartoon Network como una bailarina. Aunque su papel fue breve, esa experiencia fue decisiva. “Ese pequeño rol me enseñó que la danza es un viaje constante de aprendizaje y autodescubrimiento,” dice Sabrina. Fue en ese momento que decidió que quería ir más allá de ser solo una bailarina; quería ser una artista completa, capaz de comunicar a través de diferentes medios.
A lo largo de los años, la danza siguió siendo una parte integral de su vida, incluso cuando asumió otros roles como presentadora de televisión y creadora de contenido digital. Para Sabrina, la danza no es solo un talento o una habilidad; es una forma de vida que moldea la manera en que se enfrenta a los desafíos, tanto personales como profesionales.
Uno de los momentos más significativos en su viaje como bailarina fue su participación en el reality show “Bailando con las Estrellas.” Para muchos, estos programas son una oportunidad para ganar fama, pero para Sabrina fue mucho más. “Competir en ‘Bailando con las Estrellas’ no fue solo una competencia; fue una oportunidad para reconectar con esa parte de mí que se siente más viva cuando bailo,” comenta. Durante el programa, Sabrina dejó ver su vulnerabilidad, su pasión por la danza y su habilidad para conectarse emocionalmente con la audiencia.
El desafío físico y emocional de bailar cada semana ante millones de espectadores fue una experiencia transformadora. “La danza es un acto de valentía,” reflexiona Sabrina. “Requiere mostrarse tal como eres, con tus fortalezas y debilidades, y permitir que el público sienta tu historia a través del movimiento.” Su participación en el show culminó con un merecido tercer lugar, pero el verdadero premio fue redescubrir el poder que la danza tenía en su vida.
Hoy en día, la danza sigue siendo una fuente de inspiración para Sabrina Veris, influenciando no solo su contenido digital sino también su forma de ver el mundo. La disciplina, la constancia y la capacidad de comunicar emociones profundas a través del cuerpo son lecciones que ha llevado a cada uno de sus proyectos. “La danza me enseñó a ser auténtica,” explica Sabrina. “No puedes fingir un sentimiento cuando bailas; es un arte que te obliga a ser completamente honesta contigo misma y con tu audiencia.”
Aunque ha explorado otros caminos en su carrera, desde la presentación televisiva hasta la creación de contenido infantil y el mundo del fitness, Sabrina siempre encuentra una manera de integrar la danza en su vida. Recientemente, ha comenzado a compartir videos de danza en sus plataformas digitales, donde fusiona la narrativa con el movimiento, explorando nuevos estilos y colaborando con otros bailarines emergentes de la región.
“Creo que la danza tiene un poder inmenso para conectar a las personas,” afirma Sabrina. “Mi meta es usar esa conexión para inspirar y motivar a otros a encontrar su propia voz, ya sea a través de la danza, el arte o cualquier otra forma de expresión.”
Mirando hacia el futuro, Sabrina Veris sueña con crear un proyecto que combine todas sus pasiones: la televisión, el fitness, la creación de contenido digital, y por supuesto, la danza. “Me encantaría producir un programa que mezcle baile, entretenimiento y desarrollo personal,” dice con entusiasmo. Un espacio donde tanto jóvenes como adultos puedan encontrar inspiración, aprender nuevas habilidades y, sobre todo, descubrir la magia de contar historias a través del movimiento.
Para Sabrina Veris, la danza es más que una habilidad artística; es un reflejo de su alma. Es la fuerza que impulsa su creatividad, su disciplina y su capacidad para conectarse con los demás. Mientras sigue explorando nuevos horizontes en su carrera, una cosa es clara: la pasión de Sabrina por la danza sigue viva, y su historia como bailarina continúa escribiéndose, paso a paso, en cada proyecto que emprende.