Prohibido aburrirse: poker y otros juegos de mesa online
Se suele decir que el destino es quien baraja las cartas, pero que es a nosotros a quien nos toca jugarlas. Una frase muy profunda sobre la vida que si la tomamos en el sentido literal seguramente se antoja insuficiente en los tiempos que corren. Quizás habría que completarla así: “El destino baraja las cartas, pero nosotros las jugamos donde queremos y cuando queremos”.
Sin entrar en temas trascendentales sobre el sentido de la vida, lo cierto es que, si existe un destino mezclando naipes, nunca había sido tan fácil jugar una partida de cartas. Aquello de reunirse unas cuantas personas alrededor de una mesa y tener una baraja disponible ya no es ni necesario. Basta con tener conexión a internet y saber cuatro normas básicas para poder entretenerse y desconectar de la realidad durante unas horas.
A continuación, le proponemos cuatro juegos de cartas diferentes para tu ocio y disfrute personal:
PÓKER
Sin duda alguna, el rey de los juegos online. Según destaca el periódico hondureño Diez, algunos estudios estiman que unos 100 millones de personas se retan jugando en línea a este deporte. De esos 100 millones, aproximadamente 4 millones viven en América Latina.
De hecho, en Venezuela existe un buen puñado de jugadores que destacan sobremanera y han conseguido vivir de su habilidad en el póker.
Como informa The Hendon Mob, hay tres grandes referentes en el país que superan los 2,4 millones de dólares americanos de beneficios. Se trata de Iván Alexander Freitez-Rosales, Giuseppe Iadisernia y Dorian Alejandro Rios Pavon.
El póker en su modalidad Texas Hold’em (la más popular) es un juego fácil de entender, pero evidentemente muy complicado de jugarlo a un nivel profesional por la altísima calidad de los jugadores que hay en el panorama internacional.
Aprender a jugar bien a póker, además, le da una resiliencia mental que luego puede aplicar en muchos otros ámbitos de la vida. Por ejemplo, aprender a analizar su rival para saber si puede llegar a tener una mejor jugada que usted o este le está engañando (lo que se conoce popularmente como un farol) le enseña mucho sobre la psicología humana.
Este archiconocido juego de cartas le muestra también que hay que ser muy paciente a la hora de decidir cuándo sí y cuándo no jugar. Evidentemente, los jugadores excesivamente temerarios acabarán pagándolo caro y muy posiblemente sean eliminados muy temprano. Sin embargo, aquellos que tiendan a ser demasiado miedosos es posible que sean superados fácilmente por otros rivales que se den cuenta de su debilidad. Como todo en esta vida, en el punto medio suele encontrarse el equilibrio.
Otra manera de aprender a analizar a los rivales a los que se pueda enfrentar es mediante su comportamiento. El ex presidente de los Estados Unidos Richard Nixon, un hábil jugador de póker, solía decir que las personas con buenas manos tienden a permanecer mucho más calladas que los que están intentando engañarle, que suelen ser mucho más bravucones. La verdad es que no le fue nada mal a Nixon. Como recuerda el periódico deportivo español Marca, el político pudo impulsar su campaña gracias al dinero que ganó en 1942 mientras estaba alistado en la Marina combatiendo en la Segunda Guerra Mundial.
Si desea iniciarse en un juego como el póker, existen numerosas webs para disfrutarlo online. Una que es líder de la industria, que permite acceso a toda la información y diversos juegos de poker online.
Si aún le parece un juego demasiado complejo e inaccesible, siempre le quedará la ficción. Desde aquí recomendamos encarecidamente la película Rounders, en la que unos espectaculares Matt Damon y Edward Norton le harán vibrar en la que para muchos es la mejor obra cinematográfica sobre este deporte. Apuestas, deudas, giros de guion inverosímiles en un film de culto que justamente cumplió 25 años de su estreno hace unos meses.
CATAN
Hablar de Catan es hablar de uno de los pasatiempos más en auge de los últimos tiempos. Creado por Klaus Teuber en 1995, este juego de mesa moderno ha generado una gran cantidad de fans acérrimos que no han podido resistirse a esta fiebre.
Catan se basa en un sistema de comercio en el que las habilidades de negociación serán un aspecto clave para poder vencer. Mediante cinco materiales básicos (piedra, arcilla, paja, madera y oveja), los jugadores retrocederán 1000 años atrás en el tiempo y volverán a la época medieval.
Se trata de un juego que tiene un alto componente competitivo, así que, si quiere mantener su amistad con su pana de toda la vida, le recomendamos que se lo piense dos veces. Bromas aparte, es un pasatiempo excelente para trabajar la mente sin darse cuenta mientras uno se divierte. Se encuentra disponible en su versión online.
SOLITARIO
Si tampoco es de los que le gusta socializar demasiado o simplemente le cansa tener que competir con otras personas, siempre le quedará el clásico de los clásicos: el solitario. Como su propio nombre indica, usted solo se sirve y se basta para disfrutar de un entretenimiento que no entiende de modas.
Por si fuera poco, se trata de un juego bastante simple, del que aprender las reglas le costará unos pocos cuantos minutos, si no las sabe ya. La premisa es que, con un mazo de 52 cartas francesas o españolas, deberá crear cuatro filas diferentes, una por cada palo, de manera ascendente.
Según destaca OKDiario, una de las curiosas teorías que corre sobre la invención de este juego es que fue ideado por un aristócrata francés mientras permanecía en la prisión de la Bastilla. Así que ya saben: si tienen mucho tiempo libre, mucha paciencia y poca compañía, quizás esta es su mejor opción. Si no tiene ni baraja de cartas, siempre la queda la opción online.
UNO
Un artículo sobre juegos de mesa no podía terminar sin el pasatiempo más familiar de la historia. Hablar de cartas y no hablar del Uno es una temeridad que no estamos dispuestos a cometer. Un juego que ha unido generaciones a lo largo de los años: desde la abuela que roza las 70 primaveras a la nieta que acaba de cumplir los 9, casi todo el mundo lo ha jugado alguna vez.
¿Su secreto? Seguramente se resuma en dos motivos, que también han sido la clave del éxito de muchos otros: rapidez y sencillez. Aprender las reglas del Uno toma algo menos de cinco minutos y una ronda puede disputarse en menos de diez. En consecuencia, sólo así se entiende como Mattel, la propietaria del juego desde 1992, vende más de una copia del juego cada cuatro segundos, como recoge el diario El País. Casi nada.
El Uno va muy vinculado al juego en su versión física, pero no es de extrañar que cada vez más los amigos se conecten online para echar unas partidas. Si usted quiere jugarlo a través de su móvil, una buena opción es la App oficial, creada por la propia Mattel.
Como ha quedado más que comprobado, aburrirse es una opción poco posible hoy en día. El auge de los pasatiempos online ofrece un entretenimiento que ayuda a matar las horas muertas y a olvidar momentáneamente nuestras rutinas. Póker, Catan, Solitario, Uno son sólo cuatro de los incontables juegos de mesa que puedes encontrar en línea.
Volviendo al inicio, si el destino es quien baraja las cartas, al menos preocúpese de tener una buena red wifi cerca.