Disputa por el Esequibo: el silencio cómplice de Cuba en su apoyo a Guyana
Expertos internacionales explicaron que la afinidad política de los gobiernos de Guyana con Cuba ha sido histórica, y afirman que en la última etapa de la disputa por el Esequibo entre Guyana y Venezuela, el Gobierno de Cuba, apéndice del chavismo, ha guardado un silencio cómplice a favor de Guyana.
Los gobiernos de Guyana han mostrado afinidad política con Cuba desde su independencia del Reino Unido, en 1966, dijo el experto en relaciones internacionales Carlos Romero a VOA. Guyana siguió así la línea de “coqueteo” ideológico con Cuba de algunos países del Caribe, como Granada, Jamaica y San Vicente y las Granadinas.
“Una muestra de su independencia era tener relaciones con Cuba”, gobernada por un sistema político criticado y proscrito en la región americana.
Cuando Venezuela rompió sus relaciones con Cuba en 1961 por su apoyo a la guerrilla izquierdista. En 1967, incluso, exiliados venezolanos entrenados por el régimen castrista intentaron invadir Venezuela por la playa de Machurucuto, en Miranda. Caracas retomó sus relaciones formales con el gobierno la isla en 1974, durante la gestión de Carlos Andrés Pérez, varios años después de que la mayoría de naciones del Caribe y Guyana ya había reactivado sus vínculos diplomáticos con el castrismo.
Un mismo día, el 8 de diciembre de 1972, Jamaica, Trinidad y Tobago, Barbados y Guyana establecieron relaciones diplomáticas con Cuba. La relación entre Cuba y el Caribe es de “solidaridad y apoyo incondicional”, según publicaciones diplomáticas del gobierno de la isla. Entre ellos, hay un acuerdo de cooperación comercial en salud, educación cultura, deporte y turismo.
Ahora, Cuba mantiene un bajo perfil en su política exterior por problemas “graves” en su economía y política domésticas, entre protestas de opositores, opinó Romero.
En ese contexto, estimó, el gobierno de Miguel Díaz-Canel ha mantenido “un silencio cómplice” con Guyana en su diatriba contemporánea con Venezuela.
Por su parte, el especialista en asuntos internacionales Félix Arellano explicó que el tradicional apoyo al chavismo de los gobiernos de izquierda en América Latina y el Caribe se vio trastocado por su “actitud agresiva” hacia Guyana por el Esequibo, tras la asignación de concesiones petroleras por Georgetown en zonas por delimitar.
Entre apoyos del Caribe a Guyana y las diligencias diplomáticas de un Brasil gobernado por el izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva, Venezuela se topó con el “silencio ensordecedor” de Cuba, un “golpe duro” para Caracas, estimó.
Cuba ha mantenido una aparente e inusual neutralidad en este asunto de la política exterior actual de Venezuela, incluso frente a los respaldos categóricos a Guyana del Caricom (Caribe), la Commowealth, Estados Unidos y el apoyo militar de Inglaterra.
“Cuba hace silencio porque tiene una larga historia ideológica con Guyana, pero también debe estar visualizando una posible participación en el manejo de recursos” energéticos y minerales en la zona en disputa. Ese tema no le ha resultado muy bien a Nicolás Maduro”.
Arellano subrayó que China, otro gran aliado del chavismo, también ha asumido una posición “prudente” ante las tensiones por su diferendo con Guyana.