Israel solo dará «pequeñas pausas» a la guerra para liberar rehenes del Hamás
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, dijo que su país tendrá una “responsabilidad general sobre la seguridad” en Gaza durante un periodo indefinido después de su guerra con Hamás, el indicio más claro hasta el momento de que planea mantener el control sobre el enclave costero donde viven unos 2,3 millones de palestinos.
En una entrevista con ABC News que se emitió el lunes por la noche, Netanyahu expresó su disposición a “pequeñas pausas” en el conflicto para facilitar la liberación de algunos de los más de 240 rehenes capturados por Hamás en su asalto del 7 de octubre a Israel, que desencadenó la guerra hace exactamente un mes.
Pero descartó cualquier alto el fuego general sin que se produzca la liberación de todos los rehenes, y la Casa Blanca dijo que no había acuerdo con el pedido del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, de una pausa humanitaria más amplia tras una conversación telefónica entre los dos líderes el lunes.
Las tropas israelíes llevan más de una semana combatiendo a los insurgentes palestinos dentro de la Franja de Gaza, y han logrado dividir el territorio por la mitad y rodear la Ciudad de Gaza.
La guerra está teniendo un alto costo. Los ataques aéreos israelíes han arrasado cuadras enteras en todo el territorio y alrededor del 70% de la población ha abandonado sus hogares, muchos de ellos siguiendo las órdenes israelíes de dirigirse al sur del asediado territorio, que también está siendo bombardeado. Los alimentos, los medicamentos, el combustible y el agua escasean, y las escuelas gestionadas por Naciones Unidas, que se han convertido en refugios, están desbordadas.
La cifra de muertos palestinos ha superado las 10.000 personas, dijo el Ministerio de Salud gazatí, dirigido por Hamás, incluyendo más de 4.100 niños. Hay más de 2.300 desparecidos que se cree que están sepultados bajo los escombros de los edificios destruidos, agregó. El ministerio no distingue entre víctimas civiles y combatientes, e Israel dijo que ha matado a miles de insurgentes.
En el lado israelí, unas 1.400 personas han perdido la vida, en su mayoría civiles que murieron en la incursión de Hamás el 7 de octubre, que dio inicio a la guerra. Israel ha prometido apartar a Hamás del poder y aplastar sus capacidades militares.
Israel centra su campaña en la Ciudad de Gaza, que antes de la guerra tenía una población de alrededor de 650.000 personas. Según el ejército, el grupo insurgente tiene una amplia infraestructura militar en la ciudad, incluyendo una vasta red de túneles, y lo acusa de utilizar a los civiles como escudos humanos.
Se cree que varios cientos de miles de personas siguen en el norte del enclave, en la trayectoria del asalto. El ejército dijo que mantiene un corredor de un único sentido para que los residentes en la ciudad y sus alrededores se marchen al sur. Pero muchos tienen miedo de utilizar la ruta, en parte porque está controlada por los soldados israelíes.
Los residentes en el norte de Gaza reportaron intensos combates durante la noche y la madrugada del martes en las afueras de la Ciudad de Gaza. El campo de refugiados Shati, un distrito urbanizado que alberga a refugiados de la guerra de 1948 y a sus descendientes, ha sido objeto de intensos bombardeos por aire y tierra en los dos últimos días, de acuerdo con los residentes.
Marwan Abdullah, que es una de las miles de personas que se refugian en el hospital de Shifa de la Ciudad de Gaza, contó que escucharon constantes explosiones durante la noche mientras las ambulancias llevaban a muertos y heridos desde Shati al centro. “No pudimos dormir. Las cosas empeoran cada día”, dijo.
En el sur de Gaza, donde se había pedido a los palestinos que buscasen refugio, un ataque aéreo israelí destruyó varias viviendas a primera hora del martes en la localidad de Jan Yunis. Los equipos de emergencias rescataron cinco cadáveres, incluyendo los de tres menores muertos, de los escombros, según un reportero de The Associated Press presente en el lugar.
La guerra ha avivado las tensiones en la región e Israel y el grupo insurgente libanés Hezbollah han intercambiado disparos a lo largo de la frontera. Más de 160 palestinos han muerto en la Cisjordania ocupada desde el inicio de la guerra, principalmente durante protestas violentos y tiroteos con las fuerzas israelíes durante redadas de detención.
Israel capturó la Franja de Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este en la Guerra de los Seis Días de 1967. Israel se anexionó Jerusalén Oriental en un movimiento que no está reconocido por gran parte de la comunidad internacional y considera que toda la ciudad es su capital. En la Cisjordania ocupada ha levantado asentamientos en los que ahora viven 500.000 colonos judíos.