Luis Angarita: Operación del Grupo Wagner no es amenaza para Rusia, pero sí un punto de inflexión
Durante las últimas horas, la rebelión del Grupo Wagner y su desafío contra Vladimir Putin fue titular mundial. Para el doctor en Ciencias Sociales y candidato a decano de FACES-UCV Luis Angarita esto constituye un punto de inflexión, pero explicó que no es una amenaza real para Rusia.
Este sábado, el presidente de Rusia, Vladimir Putin prometió responder con dureza a lo que catalogó como una «puñalada en la espalda y traición» motivadas por intereses egoístas; traición contra el país, el pueblo y la causa común, por la cual soldados y comandantes del grupo Wagner lucharon codo a codo con las unidades regulares. Según reporte de Sputnik, se introdujo el régimen de operaciones antiterroristas en la capital y en la provincia de Moscú, por motivos de seguridad, y se establecieron restricciones en varias carreteras federales. Las provincias de Lípetsk y Vorónezh, así como las ciudades de Moscú y Rostov del Don, cancelaron las reuniones masivas programadas.
La noche del sábado, se conoció que el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko sostuvo mediante un acuerdo con Putin conversaciones con Prigozhin, y que el jefe de Wagner había aceptado detener el avance de sus combatientes hacia Moscú para evitar derramamiento de sangre.
En conversación telefónica con ND, Angarita sostuvo que esto es un punto de inflexión importante en la crisis que enfrenta Putin.
«Estamos en un contexto en el que después de acabar el invierno y empezar la primavera y el verano, se esperaba que se retomaran acciones militares, que se retomara el debate geopolítico y todo lo que son las negociaciones en el marco económico; pero resulta que Ucrania inició una contraofensiva apoyada por Occidente, en la que busca escalar la violencia al utilizar aviones de caza y pilotos que manejan F16, lo que lleva la guerra a un mayor nivel de capacidad de destrucción para romper la franja que une Rusia con Crimea que está hoy en día bajo el control militar ruso».
Esta acción militar marca un antes y un después, soguió, porque hace perder un control importante del terren y la estrategia del dominio del Donbas.
Pese a que es significativo desde el punto de vista militar, Angarita acotó que desde el punto de vista geopolítico, la acción del Grupo Wagner -mercenarios conocidos a nivel mundial por sus acciones en África y Medio Oriente- y que ahora encabeza el reclutamiento de personas convictas para llevarlo a frente de Rusia, tiene otro significado.
«Moscú ha roto el apoyo a este grupo de mercenarios y ahora, aparecen tomando un punto estratégico que es el Puerto de Rostov, el centro militar que está atendiendo toda la guerra en Ucrania. Se hablaba de una marcha en ese punto, hacia Moscú que son unos mil kilometros, pero la marcha fue detenida. Esto de alguna manera frena la interpretación de que sea un golpe de Estado».
El experto en estudios internacionales precisó que los Wagner solo cuentan con 50 mil personas frente a un ejército de mas de 1 millón de personas.
Por tanto, estimó «no es que esto vaya a amenazar al gobierno de Putin, en el corto plazo, pero sí es un punto de inflexión toda vez que crea una brecha importante en lo quue es la estrategia militar rusa en Ucrania».
Además, es un espaldarazo del avance ucraniano en el terreno para retomar un territerio dominado por Rusia y exacerba las diferencias internas de Rusia que no solo son económicas y políticas con los atentados al control, sino también militar porque hay acciones militares dentro de su propio territorio.
«Sin duda es una de las crisis más importantes desde la disolución de la Unión Soviética».