¿Qué pasará con los inhabilitados?: Salamanca dice que Negociación de México está «desahuciada»
Este 26 de febrero, se cumplirá otro mes desde que la Plataforma Unitaria y delegados de Nicolás Maduro firmaron el Acuerdo Social a través del cual se crearía un fondo para atender la crisis humanitaria en Venezuela. Pero nada ha pasado. En medio de declaraciones de ambos bandos, quedó la expectativa de qué pasaría con los otros temas de la agenda: cronograma de elecciones libres y justas, garantías democráticas que incluye liberación de presos políticos, regreso de exiliados y la instauración de justicia transicional, entre otros.
El miércoles 15 de febrero, la Comisión Nacional anunció al país la fecha de La Primaria: será el domingo 22 de octubre, cuando los ciudadanos podrán votar para definir quién será el candidato o candidata de la oposición democrática que se medirá ante el chavismo en la próxima elección presidencial que debería ser en 2024, según la constitución.
El presidente de la CNP, Jesús María Casal reiteró que podrán inscribirse todos aquellos candidatos que hayan demostrado que luchan por la libertad y la democracia del país, estén o no inhabilitados políticamente.
«Las inhabilitaciones políticas no tienen ningún valor en las postulaciones (…) Para postularse no importa que tenga esa inhabilitación porque es violatoria de los derechos humanos», declaró Casal en un acto en el Anfiteatro El Hatillo.
Pese a que las inhabilitaciones no serán un obstáculo para correr en La Primaria, el escenario podría ser diferente para quienes aspiran llegar al objetivo principal que es la presidencial. Mientras la Negociación de México sigue estancada, la inhabilitación pesa sobre varios de los precandidatos.
Sobre el líder de VP Juan Guaidó, recaen varias investigaciones ante el Ministerio Público. Entre los nombres que se disputan la candidatura en Primero Justicia, Henrique Capriles, dos veces candidato a la presidencia, se encuentra inhabilitado por 15 años para ejercer cargos públicos desde 2017 por «irregularidades administrativas» cuando era gobernador del estado Miranda.
Hace unos días, Capriles reiteró a la AFP que aún no sabe si se lanzará a La Primaria, pero sí dijo que la decisión depende de si le levantan la inhabilitación. “¿El gobierno quiere legitimidad y reconocimiento? ¿Cómo presenta Maduro una elección con (opositores) inhabilitados, con esto, con esto, con eso? Maduro no es el que escoge el candidato, el que escoge el candidato tiene que ser de la población, ¡no Maduro!”.
El otro precandidato de la tolda aurinegra Juan Pablo Guanipa también está inhabilitado desde febrero de 2021, cuando el contralor Elvis Amoroso informó que Guaidó y otros 27 parlamentarios de la AN electa en 2015, incumplieron la Declaración Jurada de Patrimonio.
«México está desahuciada»
El abogado y doctor en Ciencias Políticas Luis Salamanca aseveró este viernes que la Negociación de México está desahuciada, porque Maduro ha perdido el interés en esas rondas de diálogo.
«A estas alturas del juego, la Negociación de México está desahuciada. Ya no tienen manera de darse porque Maduro y el régimen no tiene interés, piensan que ya no lograrán nada importante en ella. Más bien todo lo contrario, podrían comprometerse a cumplir una serie de acuerdos para una elección mínimamente democrática -que participe en la presidencial el electo en Primaria-. Pero también porque la vía expresa abierta entre el presidente de EEUU, Joe Biden y Maduro le permite al Gobierno obtener ciertos beneficios como la reactivación de pozos petroleros, y mayor flexibilización que era lo que buscaba el gobierno a través de las negociaciones», declaró a ND.
Además, la oposición democrática se ha embarcado en su proceso interno para definir quién será el candidato o candidata a la presidencial. Por tanto, Salamanca sostuvo que será más adelante cuando el Gobierno se enfrente a una situación distinta frente a una oposición «unificada».
«Entonces, tendrá su principal desafío político y tratará de sacar todo el repertorio al que nos ha acostumbrado de ilegalizaciones e inhabilitaciones. Yo lo que veo es que no hemos entrado todavía en esta última etapa, pero vendrá. No soy profeta pero es bastante probable que se repita lo que pasó en el pasado: es posible que Maduro piense que puede ganar una elección con sus votos propios, sin muletas del Estado, sin sacar a sus adversarios del camino. Ojalá ocurra este segundo supuesto y podamos los venezolanos votar por un candidato opositor».
En sus palabras, Nicolás Maduro ha demostrado reiteradamente que la Negociación de México era una «apuesta» a ver si conseguía beneficios en materia económica y reconocimiento internacional. Pero sus expectativas cambiaron tras el fin del gobierno interino.
«Ya no hay una instancia, aunque sea simbólica, alrededor de la cual se pueda generar una confrontación permanente con la oposición. Eso no existe y Maduro ha logrado allanar el camino sin negociación y reservándose la carta del repertorio antidemocrático que viene usando desde 2015 -inhabilitaciones, judicializaciones a los partidos, elecciones sin oposición-; pese a que no ha logrado apoyo internacional porque las sanciones se mantienen casi igual, Maduro no hará concesiones».
Más bien, todo lo contrario, sostuvo:
«Maduro podría jugar con restricciones diversas, me gustaría que no fuera así, pero lo que está en juego es el poder presidencial, el eje de poder de todo régimen. En ese punto, creo que no hay nadie que pueda convencer al Gobierno de negociar sobre ese poder presidencial, de que lo empuje a intercambiarlo, por ejemplo, por condiciones democráticas versus sanciones internacionales».
Las «dudas» de Maduro
Nicolás Maduro condicionó la reanudación de la Negociación de México, porque la Plataforma Unitaria no ha podido cumplir su palabra de liberar los 3 mil millones de dólares que se aprobaron para el Acuerdo Social.
«Cuando dialogas tienes que tener palabra», enfatizó Maduro durante el programa Con el mazo dando moderado por Diosdado Cabello, el mismo día que se anunció la fecha de La Primaria. «¿Qué certeza puede dar sentarse a hablar con esa gente otra vez?. Firmaron un Acuerdo Social por 3.200 millones de dólares y a esta altura se están haciendo los locos, dicen que no tiene un dólar y que no están seguros de que puedan cumplir ese acuerdo».
«Si no pueden cumplir con el acuerdo ¿Qué motivación puede tener el gobierno revolucionario, el gobierno bolivariano para volver a sentarse en una mesa con ese sector de la PUD? Esa es la realidad de un sector que no tiene palabra, que llamaron a las sanciones, que llamaron a la invasión y que firman un acuerdo por 3.200 millones y no lo cumplen», fustigó.