Tras muerte de niño en Delta Amacuro: Monitor Ciudad alerta sobre consumo de agua contaminada de quebradas y caños
Habitantes de la comunidad de Los Güires en Tucupita -Delta Amacuro-, denunciaron que debido a la ausencia de políticas públicas, desde hace años no tienen agua potable por lo que se han acostumbrado a sobrevivir con agua de lluvia o la que sale contaminada de un caño. Lamentaron que hace poco murió un niño tras consumir esta agua.
Según reporte de Radio Fe y Alegría, José Moreno quien vive en Los Güires, exigió a la alcaldía atender la situación del servicio de agua potable que se ha convertido en un infierno para ellos. Sobreviven con la lluvia pero como no ha llovido, gran parte del tiempo consumen agua contaminada de un caño.
Moreno dijo al medio que hace algunos días falleció un niño en ese sector, tras presuntamente haber consumido el agua de ese caño. «Están preocupados y piden ayuda, ya que la comunidad tiene un pozo de agua comunitario, pero la bomba de succión que funcionaba en el lugar se averió hace algunos años. Desde entonces, deben bañarse y cocinar con el agua contaminada de un caño».
Al respecto, ND consultó al director de la ONG Monitor Ciudad, Jesús Armas quien lamentó lo sucedido, pero recordó que según datos de Unicef, una de las principales causas de mortalidad infantil en el mundo son las diarreas asociadas con el acceso al agua contaminada o el acceso a baños.
«Unicef dice que hay más de 85 mil muertes de niños por estas causas, es decir que mueren más niños por problemas de agua que por conflictos violentos. El conseguir agua, recolectar agua en fuentes alternativas como quebradas o caños, que es agua cruda ya que no ha sido potabilizada, es un riesgo para la salud. En especial para jóvenes y niños de 15 años».
Agua potable de Caracas no es apta para consumo humano
En octubre de 2022, Armas advirtió sobre la calidad del agua potable que ingresa por tuberías a los hogares de Caracas y enfatizó «no es apta para consumo humano».
Detalló que esto está asociado a los efectos de las lluvias sobre los embalses y a los graves problemas con las plantas de tratamiento de las principales fuentes del líquido que ingresa al Área Metropolitana. «Hay problemas con las propiedades organolépticas del agua, es decir, color, olor y sabor; lo que claramente la hace no apta para el consumo humano. Esta grave situación obedece a que a raíz de la lluvia, las cuencas de los embalses que suministran a Caracas y los mismos embalses presentan movimiento de partículas que hacen que el agua se ponga turbia».
«Las plantas de tratamiento es quizás el punto más neurálgico de todo este sistema. En el caso del sistema Tuy, la planta más importante es la de Caujarito, y todo indica que no está funcionando de manera óptima. No hay mantenimiento y probablemente tampoco acceso a los productos de purificación correspondiente como el gas cloro. Esto pone en riesgo la salud de los ciudadanos”.