México: ¿Hablamos como caballeros o como lo que somos?
Como para que no quedara dudas acerca de la mediocridad de la actuación de la Plataforma Unitaria en su reunión con los representantes de Maduro y su régimen en México, las agrupaciones políticas de la antigua MUD se han mandado con un comunicado cuyo contenido denota todo lo contrario de lo dicho en su vanidoso título: «firmes junto a los venezolanos en la defensa de un futuro mejor para todos».
Así que ni firmes ni en defensa de nadie más que de sus propios intereses por mantener el status quo que tan lucrativo les ha resultado. Pues la mentada Plataforma Unitaria ni representa a la «inmensa mayoría de los venezolanos», ni cuenta hoy con el apoyo de la comunidad internacional del que presume: el antaño Grupo de Lima es un cadáver, en la OEA perdieron la mayoría y hasta a Almagro, en Europa pregúntenle a Macrón quién es el Presidente de Venezuela y del apoyo norteamericano solo queda el vergonzoso tutelaje que liberó a los sobrinos, a Erick Malpica, le dio licencia a Chevrón y les ordenó descongelar tres mil millones de dólares represados en cuentas extranjeras a cambio de ningún avance en materia política.
Los presos siguen presos y las garantías electorales no aparecen.
En suma, una capitulación ordenada por sus mentores del norte para desmontar sus políticas fracasadas de sanciones, bloqueos, invasiones y conspiraciones que redoblaron la crisis producida por el régimen de Maduro.
De modo que sorprende la llorantina montada diciendo que fueron engañados que «el régimen ha activado una serie de acciones que buscan zafarse de los acuerdos producto del mecanismo de negociación de México».
Y lo peor es que lo acusan de infidelidad por haberse reunido con la llamada Alianza Democrática volviendo «a echar mano de su estrategia de construir y visibilizar a su conveniencia ‘oposiciones’ y activa a una facción de esa ‘oposición leal'», como si ellos fueran los únicos que tienen derecho a reunirse con Maduro y su gente.
Por cierto, la Alianza Democrática se reúne al descubierto mientras la Plataforma se reúne escondida y después lo hace en público bien lejos, donde sirve de comparsa para legitimar los acuerdos entre Washington y Caracas.
Son una vergüenza, después de haberse reunido sin rubor alguno en México y hacerle ojitos a la presencia de la señora Camila Fabri, esposa de Alex Saab, vienen a calificar como un «despropósito» la decisión de Maduro y su régimen al decidir la incorporación «a su delegación de una ciudadana italiana, casada con un ciudadano colombiano, preso en Estados Unidos, quien, valiéndose del hambre del pueblo venezolano, amasó una incalculable fortuna al servicio del régimen y quien además está solicitada por la justicia de su País». Se cuenta y no se cree.
Para colmo de males, en una Oda a la inconsistencia el señor Tomás Guanipa dijo que lo de México fue un exitazo.
¿Será que preparan un nuevo recule a la ruta electoral? Ese comunicado hiede a abstención.