Nuevos choques en el homenaje a una joven muerta en las protestas en Irán
Teherán, 3 nov (EFE).- Irán vivió este jueves nuevos choques entre manifestantes y fuerzas policiales durante el homenaje de cientos de iraníes a una joven que murió hace 40 días cuando participaba en las protestas que sacuden Irán desde hace semanas.
La ciudad de Karaj, vecina de la capital, se convirtió en el centro de las protestas cuando cientos de personas trataron de llegar al cementerio donde descansa Hadis Najafi, de 22 años, en el 40 día de su muerte, fecha que en la cultura iraní tiene una gran importancia y pone fin al luto familiar.
Najafi murió el 21 de septiembre en Karaj cuando participaba en las protestas por el fallecimiento el 16 de septiembre de Amini, tras ser detenida tres días antes por la Policía de la moral por llevar mal puesto el velo islámico.
Las autoridades impidieron con gases lacrimógenos y el cierre del cementerio que los manifestantes llegasen al camposanto para conmemorar a la joven que se convirtió junto a Amini en un símbolo del descontento popular.
Vídeos sin verificar compartidos en redes sociales mostraron a manifestantes alrededor de un coche ardiendo en una carretera cortada y mujeres sin velo gritando “mujer, vida libertad”, el eslogan de las protestas.
Las imágenes son parecidas a las vividas en el homenaje para conmemorar los 40 días transcurridos desde la muerte de Amini, celebrado el 26 de octubre en la ciudad de Saqez, en el Kurdistán, de donde era originaria la joven de 22 años.
Al menos 10.000 personas participaron en este homenaje, en el que la Policía uso gases lacrimógenos y, según ONG extranjeras, llegó a disparar contra la multitud.
La represión de esa jornada revitalizó las protestas los días siguientes en el país con la celebración de nuevas movilizaciones, que a su vez fueron reprimidas por las fuerzas de seguridad.
Las protestas por la muerte de Amini están protagonizadas sobre todo por jóvenes y mujeres al grito de «¡Mujer, vida, libertad!» que lanzan consignas contra el Gobierno y queman velos -uno de los símbolos de la República Islámica-, algo impensable no hace mucho.
Las movilizaciones han ido evolucionando desde su comienzo y en su epicentro se sitúan las universidades, que en los últimos días han sufrido una intensificación de la represión.
Al menos 108 personas han muerto en las protestas y 12.500 han sido detenidas, según la ONG con sede en Oslo Iran Human Rights. EFE