Jorge Roig condenó detenciones de sindicalistas: Vamos a tener que reportarlo a la OIT
El expresidente de Fedecámaras y miembro del Consejo de Administración de la Organización Internacional de Trabajadores, Jorge Roig, condenó este lunes que varios dirigentes sindicales hayan sido detenidos durante las últimas semanas y aseguró que esto lo reportarán ante la OIT: «se supone que estamos en etapa de paz y esto no está bien».
En entrevista concedida a Primera Página, Roig subrayó que no se pueden dirimir las críticas «metiendo preso o cayendo a golpes» a los sindicalistas y rechazó cualquier acto de intimidación contra dirigentes sindicales. «Se supone que estamos en una etapa de paz y estas persecuciones dirigidas a criminalizar la protesta no están bien vistas. Sabemos que si la protesta fuera unida, si hubiera unión entre los diferentes sindicatos estas manifestaciones tomaran más fuerza, pero no se pueden callar las voces metiendo preso al que hable, o cayéndole a golpes».
«Estos casos vamos a discutirlos y rechazamos cualquier acto de intimidación contra todo dirigente sindical, pero también tenemos que decir que no queremos criminales en el mundo sindical porque hay quienes se aprovechan de que son sindicalistas para cometer algunos delitos, lo que queremos son sindicalistas que defiendan sus derechos con fuerza. Pero estos casos de detenciones los vamos a tener que reportar ante la OIT».
Precisamente sobre el diálogo tripartito que inició el 25 de abril -empresarios, Gobierno y sindicatos- y que cuenta con el aval de la OIT, Roig dijo que las reuniones formales se han estacando y espera que se retomen este mes de agosto porque hay que rendirle cuenta a la OIT en noviembre sobre las observaciones que se hicieron.
«Se relantizaron un poco, tenemos varias tareas pendientes antes de noviembre, está previste que en agosto se vuelvan a retomar, porque aún no hay acuerdos puntuales. Las reuniones que tienen que haber para la OIT no están ocurriendo con la formalidad que necesitan. Pero lo primero que se debe hablar es de salarios, todos sabemos que tenemos que aumentarlos, debemos hablar de devoluciones de tierras, que cese el ataque a empleadores y trabajadores».
Roig descartó que sea cierto que el salario mínimo no se puede aumentar por falta de recursos y enfatizó «hay plata para otras cosas, pero no para salarios. Hay muy poca transparencia, no se sabe a dónde va la plata, hemos dicho que el país tiene que saber a dónde va el dinero y cómo se distribuye. Eso no existe, pero si es cierto que mientras tengas una etapa inflacionaria, será más difícil porque das un aumento hoy y en tres meses ya no es lo mismo».
En este sentido, propuso que debe declararse una emergencia laboral que permita a empleadores pagar bonos sin que tenga incidencia en prestaciones sociales.
Persecución a sindicalistas
A principios de julio, Provea denunció una nueva ola de detenciones y persecución selectiva contra trabajadores, activistas sociales y políticos de oposición. Gabriel Blanco, activista de DDHH dirigente sindical vinculado a la Alianza Sindical Independiente (ASI) fue encarcelado tras ser detenido en su casa en Coche el 7 de julio. Tres días antes, el 4 de julio, los dirigentes sindicales Alcides Bracho y Emilio Negrín fueron detenidos por el Sebin: en ambos casos, se registraron allanamientos sin orden judicial a sus viviendas. También ese día, efectivos del Sebin allanaron sin orden judicial las viviendas de los ciudadanos José Castro, en Ocumare del Tuy, estado Miranda; Alonso Meléndez en el estado Falcón; John Kelbim Daniel Álvarez, en el sector San Martín de Caracas y de Yecenia Heredia en el estado Yaracuy.
Todos son activistas del partido político opositor Bandera Roja, y también participaron en las protestas realizadas contra el gobierno de Nicolás Maduro en los años 2014 y 2017. Néstor Astudillo, también de Bandera Roja, fue detenido en Charallave. El caso más reciente fue el del dirigente sindical del PCV Ángel Castillo, quien fue liberado el jueves, horas después de haberlo perseguido y «secuestrado» el Sebin. Antes de soltarlo, fue fotografiado, llevado al Helicoide y citado a declarar este viernes por «una investigación».