Venezuela está dejando de percibir $115 mil millones por el desmantelamiento de Pdvsa: Asdrúbal Oliveros
Venezuela está dejando de percibir cerca de 115 mil millones de dólares por el precario estado de su industria petrolera, que también le está impidiendo convertirse en un suplidor confiable para las grandes potencias, que sienten los embates de la invasión rusa a Ucrania.
Esto de acuerdo con el economista y socio-director de la firma de análisis socioeconómico Ecoanalítica, Asdrúbal Oliveros, quien sostiene que si el país produjera la misma cantidad de crudo que hace ocho años, pudiera aprovecharse la coyuntura actual, donde los precios del llamado “oro negro” están en máximos históricos, y obtener importantes ingresos.
“En este momento estamos perdiendo una oportunidad. Podríamos recibir, si estuviéramos produciendo lo que hace ocho años, 115.000 millones de dólares en ingresos. Hay que verle la cara a eso”, dijo en una entrevista con el periodista Román Lozinski, en Circuito Éxitos de Unión Radio. “Venezuela, lamentablemente, aunque tiene un potencial enorme para producir, un petróleo de fácil extracción, su industria petrolera está prácticamente desmantelada y no tiene hoy la capacidad de aprovechar esto que está ocurriendo”, añadió.
Pero más allá de ese tema, prosiguió el especialista, “está el hecho de ser suplidor confiable” para los países del mundo y Europa, que dependen energéticamente de Rusia.
“Un país como Venezuela, que puede producir más de 5 millones de barriles diarios, podría ser un importante suplidor, para llegar a acuerdos con las potencias. Lamentablemente, hoy no podemos jugar ese rol y estamos perdiendo esa oportunidad. Ojalá pueda darse la confluencia necesaria para no perder oportunidades, sino aprovecharlas y que eso redunde en el beneficio de las mayorías”, señaló Oliveros.
Los precios del petróleo amanecieron este 1 de junio al alza. En el caso del Brent, que es el que se negocia mayoritamente en Europa, el barril se negocia por el orden de los $116,58. El West Texas Intermediate (WTI, por sus siglas en inglés), con sello estadounidense, se comercia por los $115,65.
Ambos indicadores parecen encaminados hacia un nuevo máximo histórico. El primero de este año se reportó en marzo, cuando recién estalló el conflicto ruso-ucraniano.
La separación
Asdrúbal Oliveros explicó que el hecho de que la economía venezolana tenga síntomas tibios de recuperación responde a la separación o asincronía que existe entre el país y la economía global, algo que data desde hace años.
“No estamos en el mismo ciclo de la economía global, somos una economía muy pequeña, nos hemos aislado, los intercambios comerciales se han reducido, y por eso la interacción con el resto del mundo disminuyó”, indicó.
Es por esto que, en momentos en que las economías globales entran en recesión y la inflación amenaza con la estabilidad monetaria, en Venezuela hay “un ciclo particular independientemente de lo que pasa en el mundo”.
La raíz de ese mediano impulso responde al pragmatismo del chavismo que, abandonando los ideales socialistas y de controles, permitió “el dinamismo que se está dando en algunos sectores, lo que representa un respiro a contracorriente”.
“El mundo está entrando en ciclos de caídas, y nosotros celebremos que hay sectores que se están abriendo. En la inflación, en el mundo está preocupado y nosotros tenemos un respiro. Estamos a contracorriente”, insistió.