Unos 800 empleados de El Palito serían desincorporados y sustituidos por contratistas privadas ligadas a Irán
Al menos 800 empleados de la Refinería El Palito, en el estado Carabobo, podrían ser desincorporados para dar paso a trabajadores de contratistas privadas.
De acuerdo con el Frente Nacional de Lucha de la Clase Trabajadora (FNLCT), “está en marcha un plan para desincorporar a 800 trabajadores (dejándolos en sus casas) y sustituirlos por empleo tercerizado a través de empresas subcontratistas (outsourcing)”.
Esto lo denunciaron en Twitter, tras recibir una presunta instrucción de la Gerencia de Recursos Humanos de la refinería, donde se ordena a los supervisores restringir la entrada de los empleados al complejo refinador.
Para la organización izquierdista, dicha sustitución es violatoria de la Constitución y la Ley Orgánica del Trabajo. Critican también que los trabajadores de la planta “son acusados de provocar accidentes realmente ocasionados por la falta del mantenimiento requerido en la refinería”.
Además, alertan que el personal es víctima de hostigamiento y amenazas de criminalización con el Sebin.
“La patronal manipula para imponer extrema reducción de personal (solapada en supuesta ‘contingencia’). ¿Avanza el neoliberalismo con privatización encubierta y desregulación laboral en PDVSA?”, cuestionan y luego insisten en investigar “el entramado de negocios que violenta el ordenamiento legal venezolano”.
Bajo las directrices de Irán
De acuerdo con Armand Delon, quien es ingeniero petrolero, la movida de los trabajadores de El Palito responde a las directrices del régimen de Irán, que, según lo reportado, estaría negociando la reparación de esa refinería y del Centro de Refinación Paraguaná, en el estado Falcón.
Como lo informó Reuters, la empresa estatal de ese país Oil Engineering and Construction Company firmó un contrato de 110 millones de euros (casi 115 millones de dólares) para reparar y reactivar la refinería El Palito, cuya producción es de unos 146 mil barriles diarios.
Delon destaca también que los agentes iraníes que ahora controlan parcialmente El Palito “han desplazado a los gentes de la dictadura de Cuba” que también estaban haciendo presencia en esa empresa estatal. Esto, según el especialista, fue por una decisión del ministro chavista Tareck El Aissami.