«Hubo días en los que pensé que moriría»: Habla Franyeli Guerrero, la joven que estuvo 140 días secuestrada en Barinas
La joven de 24 años, Franyeli Guerrero, quien estuvo en cautiverio por casi cinco meses, ofreció una entrevista exclusiva al equipo de prensa Noticias 24, para relatar su experiencia tras estar 14o días secuestrada.
«Fueron 140 días de incertidumbre, angustia, dolor y tristeza, sentimientos que no se pueden explicar con palabras, fue la experiencia más horrible vivida, jamás me imaginé que pasaría por una situación así, es algo que te marca para toda la vida, pero debo dar gracias porque tengo una familia maravillosa y que por ellos es que estoy aquí de pie», dijo Franyeli Guerrero durante la entrevista.
La madrugada del jueves 19 de mayo, funcionarios del CICPC dieron con la ubicación del lugar donde permanecía Franyeli Guerrero. Ella fue raptada el 30 de diciembre de 2021, cuando salí de un salón de belleza, ubicado en el estado Barinas.
Durante la conversación con Noticias 24 confesó que por momentos pensaba que no regresaría con vida a su casa.
«Si y no, hubo momentos en los que sí, momentos en los que recé muchísimo a Dios y a la Virgen del Carmen, pero también hubo momentos en los que decía que no iba a salir, en que moriría», reconoció.
Franyeli Guerrero dice que pensaba constantemente en sus padres, hermanos y sobrinos. «Yo decía que tenía que volver a verlos, necesito pedir perdón, nosotros como seres humanos cometemos errores y también volver a decirles que los amo, muchas veces por el día a día se obvian esos sentimientos».
Sobre los comentarios despectivos que han hecho en torno a su caso, la joven envió un mensaje instando a esas personas a ser «más humanos», ya que la vida «no es un juego».
Franyeli Guerrero explicó que aun cuando siga sonriendo en fotografías o compartiendo con sus seres queridos, tras su rescate, no significa que en su interior se encuentre bien.
«Tengan empatía y respeto para mi familia. Yo no me puedo encerrar por mi familia lucho mucho y no puedo permitir decaer, necesito seguir fuerte después de tanto sufrimiento».
Tras su liberación, cuenta que lo primero que hizo fue ir a misa para dar una oración y luego poder disfrutar del sol y recibir los afectos de todos los que rezaron por ella.