Pablo Aure (UC): Acuerdo con Lacava es beneficioso, pero no debe usarse como «valla publicitaria del gobierno regional”
El secretario de la Universidad de Carabobo, Pablo Aure, defendió el reciente acuerdo firmado entre la UC y la gobernación de Carabobo de Rafael Lacava para proveer servicios de transporte a los estudiantes, aunque alertó que la Universidad no debe ser usada como «valla publicitaria» de ningún gobierno regional o nacional.
En conversación con ND, Aure se refirió a la entrega de autobuses «transdraculas» para el transporte de los ucistas, unidades de color amarillo que contienen el característico murciélago de Lacava, lo que ha generado rechazo de parte de un sector universitario.
Por otra parte, Aure reiteró su oposición a las recientes tablas salariales recordando que el gobierno de Nicolás Maduro desconoció las normas de homologación y ahora fija unilateralmente los salarios.
Y finalmente, el abogado confirmó que la matrícula estudiantil en la UC se ha elevado a 23 mil o 24 mil aunque recuerda que en su momento la Universidad llegó a tener más de 60 mil inscritos.
Recientemente se viralizó una imagen que muestra un pésimo estado del comedor de la UC, pero también se ha dicho que no es el comedor actual ¿Puede aclararnos eso?
– Esa imagen no corresponde al actual comedor de la UC. Corresponde al anterior comedor que desde hace tiempo ya no está en uso, como desde hace 6 años. Pero el actual comedor, no está en servicio por deficiencias presupuestarias, pero me consta la labor de nuestro director de comedores, el profesor Diego Pérez, al igual que la de nuestra rectora, en reabrir nuevamente esos espacios para brindar el servicio de alimentación a nuestros muchachos.
– Antes de cerrarse por falta de recursos el comedor lo usaban no solamente los estudiantes, sino el personal y los obreros. Varias veces vi al personal docente en las colas para el almuerzo del comedor universitario.
En general ¿cuál es la situación de la infraestructura de la universidad?
– Con responsabilidad te digo que no está en las mejores condiciones. Está bastante deteriorada, no solamente desde la pandemia sino desde hace tiempo que es maltratada. La Universidad de Carabobo y las casas de estudio no escapan de esa situación. Sin embargo se están haciendo intentos por recuperar la infraestructura que repito, está bastante deteriorada.
– Nuestra universidad tiene 300 hectáreas. En el campus universitario se pueden ver varios espacios bien enmontados. La maleza está bastante alta. Los pabellones también hay que acondicionarlos. Está deteriorada, no podemos tapar el sol con un dedo; sin embargo, ahí se sigue haciendo acto de presencia.
Nicolás Maduro llamó recientemente al regreso de clases presenciales. ¿Está la UC en condiciones de reabrir sus aulas?
– Nicolás Maduro no es quien para llamar a clases presenciales. Esto depende de cada universidad, por su autonomía.
– No existía mucha presencia en los últimos años en nuestras universidades, vuelvo y repito, no por la pandemia. Desde mucho antes ya había horarios de conflicto, días de conflicto, se estaba viendo la deserción estudiantil y la renuncia de personal docente, administrativo y obrero.
– Recientemente se está tratando de volver, no a la normalidad, porque no puede ser normal esto, con estos salarios y estas dificultades de los servicios públicos poder llegar a nuestras casas de estudio ¿cómo podemos exigirle al personal universitario que cumpla con su horario cuando se le dificulta llevar comida a su casa? Con los salarios, el transporte, la situación gasolina. Eso dificulta mucho la normalización de clases previa a la pandemia, de hecho, hasta se eliminó el turno nocturno.
Recientemente, el gobernador Rafael Lacava firmó un convenio de cooperación con la UC ¿En qué consiste tal acuerdo? ¿se ha estado cumpliendo?
– Es común que nuestra Universidad de Carabobo suscriba convenios con entidades públicas y privadas. Eso es algo muy normal. Convenios de cooperación, la universidad facilita cursos, coopera en algunas cuestiones y las entidades suministran ciertos recursos o elementos para establecer una especie de ganar-ganar.
– ¿Qué es lo sorprendente de este convenio entre la UC y la gobernación? Las relaciones que existían hace un par de años entre el gobierno regional y la Universidad de Carabobo. Ya supimos como el gobernador intentó involucrarse en asuntos estrictamente de la universidad, con elecciones estudiantiles en 2018; y empezaron una serie de ataques y de hecho, a mí en lo particular me dictaron una medida de prohibición de salida del país sin yo saber ni haberme enterado jamás de cualquier expediente, y así fue con la rectora, con algunos dirigentes estudiantiles, el anterior presidente del FCU Iván Uzcátegui, estuvo preso, al igual que el anterior director de comedores. Eso era inimaginable, pero esa es la universidad.
– Desde un tiempo para acá hubo un acercamiento entre el gobierno regional y la UC y gracias a Dios se tranquilizaron las aguas. Los universitarios entendemos la diatriba, los ataques en algunos casos. Podemos entender que hayan puntos de encuentro y desencuentro. Entonces se suscribió ese convenio, se le dio publicidad, hubo gente que lo criticó por el relato que ya dije, gente que lo aplaudió, como debe ser en una universidad.
– Se aprobó recibir unas unidades de la gobernación, porque son de la gobernación esos autobuses pintados de amarillo, para hacer rutas estudiantiles. Que tengamos nuestro punto de vista distinto de cómo debe llevarse esa ruta, que no debe estar pintado de amarillo, que no debe tener el murciélago, que no debe tener la cara del gobernador, ese es mi punto de vista y el de varios, que puede ser lo que se esté criticando, pero de hecho, se está brindando ese servicio de transporte.
– Tengo entendido que se va a reparar el anfiteatro de Bárbula, la unidad de atención médica, esto último lo va a aportar la gobernación, y otros beneficios por parte de la universidad es que brindará cursos de derechos humanos y hacer lo que hacemos algunos universitarios: enseñar, poner en práctica nuestros servicios del bien común.
– Si bien es cierto debemos estar de acuerdo con todo aquello que favorezca a la comunidad ucista, no es menos cierto que no podemos permitir que espacios universitarios se conviertan en vallas que publiciten a cualquier gobierno. He manifestado muchas veces mi rechazo a esa manera de hacer política. Si la UC no tiene transporte se debe a políticas deliberadas del gobierno que la ha castigado con recortes presupuestarios. Si un gobernante quiere colaborar con la UC, tiene que hacerlo como un deber de colaboración interinstitucional y no con fines proselitistas para obtener réditos políticos valiéndose de las necesidades de la UC.
– La pregunta es ¿por qué está deteriorada la universidad? Bueno, por falta de recursos que no los envía. Entonces dice, «bueno eso es como la política de te corto las piernas y te doy las muletas», esa es una manera de vernos. La otra es, qué necesitamos hacer en la UC. Necesitamos cumplir con las funciones propias de una universidad: enseñar, investigar, hacer extensión, y bueno eso es lo que estamos haciendo. Las intenciones de quienes ocupen cargos en el gobierno nacional o regional con respecto a la universidad, bueno que cada quien lo evalúe. Si me toca a mí juzgar el convenio, ¡vaya!. Lo excepcional de esto fue el comportamiento de hace unos 4 años de la gobernación y la universidad, pero no hay más nada excepcional porque vuelvo a decirlo, comúnmente se suscriben acuerdos de cooperación entre universidades y entidades del país.
Días atrás distintos rectores de universidades, entre ellos Jessy Divo, suscribieron un documento para rechazar las nuevas tablas salariales decretadas por el gobierno ¿qué opina la UC sobre este ajuste? ¿cuánto consideran que debería ser el salario de un profesor universitario?
– Este es un problema de nunca acabar. Ningún ajuste salarial que se dicte o decrete para el funcionario público será lo que necesite para vivir. Una cosa es el sueldo, y otra cosa son las condiciones de vida. Ya sabemos que el personal universitario se rige o regía, hasta el desconocimiento a este gobierno, por las conocidas normas de homologación, que consistían en que el sueldo del personal universitario se iba a ajustar cada cierto tiempo dependiendo de los índices inflacionarios, los índices de las tasas pasivas de los bancos. Eso era lo que consistían, sobre todo para considerar el índice inflacionario y ajustar cada cierto tiempo.
– Esto fue desconocido por este gobierno y unilateralmente fijan los salarios. Por supuesto que los rectores deben estar en contra de esas tablas porque desmejoraron al personal universitario, falta de reconocimiento a la antigüedad, las primas de profesionalización y ciertos derechos que ya han sido ganados a través del tiempo.
– Yo le puedo hacer ciertas críticas a esta situación porque nuestra principal lucha debió ser por mantener las normas de homologación; sin embargo, aquí como no se es perseverante en la lucha, el régimen siempre gana terreno en esa falta de perseverancia, entonces ha impuesto contrataciones colectivas y por supuesto ha rebajado las asignaciones a través del irrespeto al presupuesto que nosotros nos fijamos anualmente en la universidad porque nosotros tenemos que aprobar el presupuesto de nuestra UC a finales del año anterior.
– Por ejemplo, el de este año se aprobó a final de 2021, pero desde hace 14 años nuestro presupuesto de la Universidad de Carabobo, yo creo que toda la universidad venezolana, lo han venido reconduciendo, es decir, no es lo que nosotros enviamos al Ejecutivo, sino lo que el Ejecutivo decide enviarle a las universidades. Por supuesto, siempre está en déficit nuestras finanzas para poder cumplir con labores de mantenimiento.
– Lo único que regularmente asignan es lo que conocemos como la Partida 401, que es la que contempla sueldos y salarios, pero no de acuerdo a lo que debería devengar un trabajador universitario, sino lo que ha sido el Ejecutivo lo que debe devengar un profesor, obrero o empleado. Ni hablar de las becas estudiantiles, que no sé cual es el monto, pero debe ser algo irrisorio.
– En definitiva, bajo este esquema de gobierno ya sabemos cuál ha sido la intención de este gobierno desde hace muchos años con la universidad. Prácticamente, sino allanarla vía bota militar, sí allanarla en la desmoralización, suprimiéndole recursos, haciendo que nuestro personal se jubile, se retire o renuncie porque con los sueldos no alcanza para vivir.
¿Cómo están los índices de deserción estudiantil y de docentes en la UC a día de hoy?
– Yo como Secretario universitario me contento que ha vuelto a incrementarse la matrícula estudiantil en nuestra casa de estudio. En una época, llegamos a tener más de 60 mil muchachos estudiando en las 7 facultades, en los dos campus principales de Carabobo y Aragua. Luego esa matrícula se redujo, inscritos a 22 mil, aunque los que hacían presencia o alumnos regulares, eran mucho menos de esos porque recordemos que muchos se inscriben como para guardar el cupo, pero no son alumnos formales. Este año estamos viendo como está creciendo la matrícula. Creo que llegamos a 23 o 24 mil estudiantes.
– Hubo un momento que hubo bastantes renuncias de los profesores, por supuesto no conquistan los salarios al profesor, al administrativo o al obrero.
– Yo te digo que bajo este esquema de gobierno, cuando un trabajador, no solo universitario, sino un empleado público, no gana ni si quiera para comprar la canasta básica, podemos decir que está condenado a muerte si se dedica solo al trabajado de la universidad o cualquier función pública porque en general, allí el Estado es quien decide cuánto gana y cuánto no, y al no poder ganar lo suficiente para comprar la canasta básica, pudiéramos considerar que el gobierno frente a las universidades está cometiendo el delito de exterminio que está tipificado en el artículo 7 del Estatuto de Roma.
-Cuando lo leemos, nos damos cuenta que cuando se aplican condiciones que imposibiliten tener acceso a medicamentos o alimentos, se considerará que se comete un exterminio contra la población. Con la universidad se está cometiendo exterminio, y en general, contra los trabajadores públicos, el gobierno está cometiendo el delito exterminio previsto en el Estatuto de Roma, ni hablar de los pensionados que están condenados a muerte por las políticas de hambre que ha venido fijando el régimen desde hace varios años.
– Ojalá que en algún momento, nos podamos poner de acuerdo todos los trabajadores. En este caso llamo a los universitarios, para formalizar la petición ante los tribunales internacionales, como la CPI, para solicitar la averiguación e inclusive denunciar el exterminio en contra de los trabajadores universitarios.