Manuel Sutherland: Hay una oposición que vive de las sanciones y no le conviene que esto cambie
El economista Manuel Sutherland forma parte de los 25 opositores que firmaron una carta dirigida al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, para solicitar un “alivio” en las sanciones impuestas a la administración de Nicolás Maduro.
En entrevista con ND aclara que no se trata de hacer un intercambio de dinero por libertad, sino más bien de hacer entender al gobierno de Maduro que debe emprender políticas de apertura económica, política, electoral, que deriven en mejorar la situación de todas las personas en Venezuela.
Sutherland es economista y director del Centro de Investigación y Formación Obrera (CIFO), en Caracas.
Sus declaraciones en esta entrevista son a título personal. Señala que su opinión no tiene nada ver con el resto de los 24 connotados venezolanos que también respaldan la misiva y deja claro que no son un grupo ni una nueva oposición.
Ustedes en la carta argumentan que las sanciones no han sido efectivas en lograr un cambio de régimen o al menos un cambio de política, ¿No cree usted que parte de esa inefectividad tiene que ver con el hecho de que regímenes autoritarios se ayudan entre sí? Por tanto, ¿No sería mejor pedir más sanciones y que estas sanciones se hagan cumplir?
– Creo que este tipo de regímenes no le importa mucho el efecto negativo que tengan las sanciones en la economía. Yo creo que las sanciones estimulan, o pudieran estimular, un cambio político de manera muy limitada en muy pocos países en circunstancias muy particulares.
– En un estudio que se hizo hace algunos años, en 11 % de los casos las sanciones fueron clave para el cambio político. Entonces creo que las sanciones, en este tipo de países, no son el mecanismo más potente para el cambio político.
– Pedir más sanciones, para mí, no tiene ningún sentido. Porque las sanciones afectan a la población civil, a la población más vulnerable y no afecta a la élite gobernante, con mayores recursos que puede sortear las sanciones, a través de testaferros, paraísos fiscales, cuentas off shore, compañía de maletín; un montón de estrategias que sortean el grueso de las sanciones. Pero la población civil, el país, sufre la pérdida o las dificultades para vender petróleo, cobrar las facturas petroleras y también las empresas nacionales sufren con las sanciones.
– Mucha gente no puede abrir cuentas en el extranjero, tienen dificultades para hacer negocios, no tienen acceso a cartas de crédito, tienen un montón de dificultades. Víctor Álvarez (economista y otro de los firmantes de la carta) ha hecho un trabajo importante entrevistando a empresarios venezolanos que, sin tener nada con el chavismo, han sido víctimas de enormes dificultades por las sanciones. Yo creo que un país con una crisis tan fuerte no necesita palos en la rueda sino ayuda humanitaria y económica. Las sanciones van por la vía opuesta.
Detrás de la propuesta de eliminar las sanciones subyace una creencia: que Miraflores va a recibir más ingresos y que estos ingresos serán utilizados para aliviar la crisis humanitaria. ¿Usted cree que esto será así? ¿No cree que este dinero extra será utilizado para comprar, por ejemplo, más armas rusas o pagar deuda a Cuba, o terminará en las arcas de los corruptos? Por algo en Venezuela no hay un presupuesto nacional serio desde hace 15 años.
– Bueno, yo creo que si las sanciones se eliminaran en un supuesto negado, ello vendría de la mano con negociaciones para que el gobierno bolivariano, de alguna manera, emprenda políticas de apertura económica, política, electoral, que ofrezca mejores garantías, liberar presos políticos. Algunos acuerdos que, discutidos de manera profunda y con un compromiso entre las partes, pudieran mejorar la situación de todas las personas en Venezuela.
– Evidentemente no creo que todo el dinero que se negocia a través del petróleo sea sustraído por la corrupción, eso es completamente imposible, porque el dinero se vende en las mesas interbancarias, las divisas entran para pagar importaciones, para pagar un montón de cosas.
– Lo que pudiera hacerse es condicionar una mayor transparencia, objetividad y capacidad de fiscalización de los ingresos que puedan generarse por la venta de petróleo de EEUU o de petróleo venezolano extraído por empresas estadounidenses.
– Hay un montón de programas que han hecho a través de la ONU u otro organismo internacional que pueden verificar que los ingresos por exportaciones se puedan emplear de manera humanitaria o transparente. Eso es solucionable.
– Yo no creo que el Gobierno pueda apropiarse de todo ese recurso, en el peor de los casos. En mi opinión hay un riesgo importante de corrupción, pero para mí el riesgo más importante de corrupción lo dan las sanciones, porque obliga al gobierno a triangular y a vender el petróleo por debajo de la mesa y de una forma mucho más oscura que si se vendiera de una forma mucho más transparente, mucho más abierta. En el peor de los casos, si se vende de una manera más formal, abierta, transparente, se podría vender sin descuento así que el ingreso sería mayor y aun cuando siga habiendo corrupción, todavía el ingreso fiscal sería mayor.
¿Usted no cree que eliminar las sanciones y aumentar la producción petrolera le daría a Maduro un incentivo importante para reforzar su régimen dictatorial y continuar violando los DDHH? Esto implica mantener el control de Maduro sobre el CNE, sobre los medios de comunicación, y significaría no tener elecciones presidenciales libres en 2024.
-Bueno, yo creo lo contrario. En la medida que el precio del petróleo baja y la crisis se agudiza, la pobreza aumenta y las dificultades se incrementan, el Gobierno es más agresivo, mucho más violento con la oposición y tiende a ser mucho más represivo, proclive a la violación de DDHH.
-Creo que si la situación económica mejora, eso pudiera ser una base para un posible retorno a la democracia, a la participación de la oposición de manera mucho más justa, abierta, de manera mucho más honesta en la política. Y para mí, la eliminación de sanciones pudiera venir con negociaciones que permitan un CNE más equilibrado, que permitan asegurarse de alguna manera condiciones electorales para 2024 mucho más sólidas, que permitan de alguna forma, también, negociar condiciones sociales mucho mejores, permitir una apertura económica que de alguna manera haga que la economía crezca, que las empresas vuelvan a abrir, que frene el éxodo que tanto beneficia al Gobierno y que se concentre en la posibilidad de que los venezolanos puedan hacer política propositiva en Venezuela, crecer en Venezuela y levantar y luchar por sus derechos en condiciones sociales mejores. En condiciones de extrema pobreza y miseria es muy difícil la lucha por los derechos conculcados por cualquier gobierno.
– En mi opinión, una mejora económica debería coadyuvar a que la población pueda luchar en mejores condiciones.
En su carta subyace otra creencia, una de costos y beneficios: Que ustedes están preparados para aceptar los costos asociados con la falta de libertades políticas a cambio de que, al menos, una parte del dinero extra se utilice para aliviar la crisis económica, ¿Qué cree usted?
– Sí, yo insisto, la eliminación de las sanciones o su flexibilización, debería estar asociada con un aumento de las libertades políticas, con un aumento de las condiciones electorales, una mejora en las condiciones sociales o en las formas que tiene la población para expresarse.
– Para mí, debería haber libertad de todos los presos políticos de cualquier tinte, un CNE equilibrado, garantías de observación internacional y de no inhabilitación de candidatos para 2024. Deberían hacerse varios acuerdos que yo creo que el chavismo pudiera acceder y creo que pudiera, de alguna manera, acordarse cosas que le permitiese a la gente expresarse de una manera mucho más libre y segura.
– No es que estoy haciendo intercambio entre dinero y libertad. Creo que se pudiera obtener una mejor condición electoral y política, negociando abiertamente la posibilidad de eliminar algunas sanciones y ofrecer garantías políticas mínimas.
– También es importante, en mi opinión, entender que la mejora económica de la nación, permitiría a la gente ser menos dependiente de las ayudas del gobierno, lo que haría que sean más independientes a la hora de opinar, a la hora de promover sus ideas políticas y también puede que si la economía mejora y los salarios mejoran eso frene el éxodo de muchos venezolanos que, estando afuera, no pueden votar en contra del Gobierno y no pueden activarse en luchas o protestas dentro del territorio, y también considero que si la situación mejora, pudiera haber una independencia social más importante, lo cual permitiría a la gente expresarse sin el temor de que el Estado le quite el sustento mínimo para poder sobrevivir.
– Igualmente la oposición tenía como base económica la ayuda del empresariado. Si el empresariado está completamente arruinado y cercado por las sanciones es mucho más difícil que pueda apoyar a los candidatos políticos que tengan un programa opositor puntual y ese político tendría mayor dificultades para crecer sin alguna ayuda.
Si ustedes están planteando levantar sanciones a cambio de mejorar las libertades políticas, ¿En qué se diferencian de la oposición que cuestiona esta misiva?
– Bueno, yo creo que hay una oposición que le conviene las sanciones, que vive de las sanciones, que se ha apropiado de activos muy valiosos en el extranjero de los cuales hace una administración bastante poco transparente, bastante poco auditable y del usufructo de esos activos viven bien.
– Hay una oposición que le conviene que las cosas no cambien, que sigan igual, porque viven del manejo de ayudas políticas, humanitarias y vive también de ser oposición en sí misma. Un cambio en la política nacional, progresiva, no les conviene económicamente porque perderían un ingreso bastante importante. Entonces, prefieren jugar a ser oposición para siempre y a exigir cosas imposibles que no se puedan dar y cosas para las cuales no tienen ni la más remota fuerza para poder imponer.
– Es decir, la oposición que dice que ellos pudieran abogar por la eliminación de sanciones si hay elecciones presidenciales mañana y Maduro se entrega a Guantánamo de manera voluntaria, eso es una muestra clara que no quieren dialogar, no quieren negociar, no quieren que las cosas cambien ni un poco y que les sirve económicamente la posición absoluta de estancamiento total que tiene la oposición actual. Este estado de parálisis le sirve, porque siguen haciendo política por Twitter, idealista e irreal, y haciendo dinerito que les cae por alguna vía foránea.
– Esta oposición no quiere que las cosas mejoren y consideran que si las cosas mejoran la gente se convertirá en chavista y dejará de apoyarlos, porque tienen el discurso de que la economía no puede mejorar ni un centímetro, porque Maduro está dirigiéndola. Entonces si la economía mejora un poco eso les afecta en su discurso de todo o nada.
– También esa oposición lucha para que prácticamente nada mejore y así tener la misma prerrogativa de decir que hay que invadir o que hay que llevar una operación militar fantasma de extracción del chavismo de Venezuela y un montón de disparates que son bastante peligrosos. Particularmente estoy completamente en contra de esa oposición.