Francisco Rodríguez: Las sanciones económicas no cambian sistemas políticos
Ante las críticas e interrogantes que han surgido desde la publicación de la carta enviada a Joe Biden, por parte de 25 opositores, abogando por el levantamiento de las sanciones a Nicolás Maduro, el economista Francisco Rodríguez, uno de los firmantes, sale al paso en la defensa y justificación de la misiva.
Rodríguez recibe el cuestionamiento y las críticas con buena actitud, al menos así lo aparenta a través de Twitter, donde resalta que el «debate de ideas es esencia de la democracia y por tanto debe serlo también de la lucha por recuperarla».
El economista aclara en hilo de Twitter que «en ningún momento la carta que suscribimos 25 venezolanos sugiere que la flexibilización de sanciones cambiará los objetivos de Maduro, ni lo hará negociar de buena fe. Lo que planteamos es que es posible llegar a acuerdos para aliviar la emergencia humanitaria», sostiene.
La opinión personal de Rodríguez se refiere al gobierno de Maduro como un proyecto político con pretensiones hegemónicas. En ese sentido, a su juicio, supone que utilizarán cualquier iniciativa para intentar adelantar esa ambición.
«Mi planteamiento es que, aún en este contexto, se pueden utilizar las negociaciones para acordar reglas de confrontación que permitan proteger a los venezolanos del daño colateral que la crisis de gobernabilidad genera a la economía venezolana», argumenta.
«Estos espacios de negociación pueden servir para modelar la cooperación entre actores políticos y superar el dilema del juego suma-cero que contribuye a la polarización política. Así se pueden generar iniciativas que permiten atender problemas urgentes de los venezolanos», agrega.
Desde Oil For Venezuela, organismo que él preside, insisten en buscar mecanismos que permitan recuperar acceso a mercados petroleros, bajo la condición de que los recursos se usen bajo supervisión internacional y se dirijan a atender la crisis humanitaria; objetivo similar planteado en la carta.
«Entiendo la preocupación de quienes piensan que la flexibilización de sanciones puede debilitar la lucha por la democracia. Sin embargo, creo que la evidencia muestra claramente que las sanciones económicas no ayudan a cambiar sistemas políticos y pueden ser contraproducentes. Invito al liderazgo opositor a considerar estrategias que no se basen en la presión económica cuyos costos recaen sobre los más vulnerables. Sugiero considerar el ejemplo de la oposición polaca, que pidió a Reagan el levantamiento de sanciones».
Rodríguez insiste en una discusión ponderada sobre la estrategia que se debe adoptar para rescatar la democracia y proteger a los venezolanos más vulnerables de los efectos de la confrontación política. «Es hora de repensar un enfoque que claramente no está funcionando», concluyó.
