En Catia se niegan a abandonar sus casas por las lluvias: «no moriré en un refugio»
Familias de la parroquia Catia en Caracas están en una situación alarmante por las fuertes lluvias que han caído sobre el país durante los últimos días. En Los Flores de Catia se derrumbaron 9 comercios y los dueños se niegan a irse: prefiero morir en mi casa que en un refugio.
Un reporte especial de Crónica Uno reveló que la emergencia por las lluvias también afecta a Caracas, y que este martes habitantes de la popular barriada vivieron horas de mucho terror cuando vieron derrumbarse sus negocios y sus hogares.
No hubo perdidas humanas, pero sí enseres y mercancía, porque las familias decidieron irse a casa de parientes o vecinos cercanos antes de que cedieran las construcciones. “Desde hace tiempo se había hablado de que las familias tenían que salir de ahí y ellos tomaron previsiones. Los que no lo hicieron fueron los dueños de los locales. Nosotros (los vecinos) estuvimos diciéndoles que tenían que salir de ahí, porque el terreno estaba cediendo. Uno de los comerciantes, incluso llegó a decirme que si se caía el local, él lo iba volver a levantar”, expresó Wladimir Barrios, habitante de la zona.
El callejón La Finca es uno de los lugares más afectados. Es descrita como «una bomba de tiempo» por el peso que generan sobre el terreno muchas de las viviendas, algunas con más de tres plantas de altura, y que están a la orilla de la quebrada.
Los muebles y otros objetos en casa de Reyna Estrella están arrimados a un costado de la casa por temor a que la quebrada vuelva a crecer y el agua entre a su hogar, el cual es de una sola planta y es de las viviendas más antiguas de la zona. Reyna vive en Los Flores desde 1982. “Yo no quiero ir a ningún refugio. No sé cuántos años de vida me puedan quedar a mí, pero no me quiero ir a morir a un refugio. Prefiero morir en mi casa que un refugio”, enfatizó la mujer de 74 años, con problemas en las rodillas y en la cervical, los cuales empeoran con el estrés que le genera la incertidumbre que la invade cada vez que empieza a llover en Los Flores de Catia.