Cuba, y la dura batalla por cubrir demanda de combustible mientras disminuyen importaciones de Venezuela
Cuba está atravesando una difícil batalla para cubrir el déficit de combustible, debido a la baja importación de Venezuela y al impulso de los precios mundiales a causa de la invasión de Rusia a Ucrania, reportó este martes Reuters, con datos de analistas.
La agencia de noticas resalta que el país caribeño depende de las importaciones de combustible, especialmente de Venezuela, para cubrir más de su demanda. Desde marzo, Cuba enfrenta escasez, tanto de gasolina como diesel, lo que genera largas filas frente a las estaciones de servicios.
Cuba se enfrenta no solo a las sanciones estadounidenses impuestas por el Gobierno del expresidente Donald Trump, sino a su intento de recuperación de la pandemia y ahora a la escasez de combustible.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha proporcionado a Cuba más de 32,000 barriles por día (bpd) de crudo desde 2019 incluso en medio de las sanciones de Estados Unidos a ambos países. Pero los volúmenes de combustible enviados han caído debido a que Caracas ha tenido problemas para producir productos refinados para sus propias necesidades, según datos.
Cuba importó unos 70,000 bpd de crudo y combustible en el primer trimestre del año, por debajo de los 100,000 bpd que la isla generalmente requiere para satisfacer la demanda normal, mostraron datos de seguimiento de petroleros de Refinitiv Eikon.
Según datos y documentos internos de la estatal Pdvsa, a la que Reuters ha tenido acceso, más de las tres cuartas partes del combustible procedía de Venezuela, sin embargo, tuvo que recortar drásticamente el envío, pasando de casi 44 mil bpd en 2020 a 21 mil bpd en 20221. En el primer trimestre de este año, 2022, se enviaron 22 mil bpd.
Antes de la pandemia, la demanda de combustibles de Cuba alcanzaba los 137,000 bpd de fuel oil, diesel, gasolina, gas de cocina y otros productos refinados, informó la Oficina Nacional de Estadísticas de Cuba.
Pese a que Cuba este año está consumiendo unos 110 mil barriles diarios de combustible, todavía necesita importaciones para compensar la insuficiente producción nacional, explicó el director del Programa de Energía y Medio Ambiente de América Latina y el Caribe, Jorge Piñón.
«Las refinerías cubanas no están 100% operativas. La refinería de La Habana, la única instalación con un craqueador catalítico, está funcionando en torno al 70% de su capacidad, mientras que la refinería de Cienfuegos, realiza esporádicamente tiradas de 10,000 bpd y Santiago no está en servicio», dijo.
El ministro de energía y minas de la isla, Liván Arronte, dijo que Cuba, que permanece bajo un embargo estadounidense que limita el libre comercio con el país, está pagando tarifas de flete y otros costos 20% más altos que los importadores que traen combustible por las mismas rutas.