«Un agente tocó mis partes íntimas y amenazó con llevarse a mi hijo»: lo que pasa en la frontera EEUU-México
El equipo de la Red Fronteriza por los Derechos Humanos (Bnhr) alertó sobre la situación vulnerable que padecen quienes viven en la frontera EEUU-México, ya que casi 30 personas aseguraron haber sido víctimas de abusos por parte de agentes, sobre todo las mujeres quienes han sufrido requisas indebidas: «tocó mis partes íntimas y amenazó con llevarse a mi hijo».
El 5 de agosto de 2021 una mujer fue a Ciudad Juárez en Mëxico para llevar al médico a su hijo -de 5 meses-. A su regreso a El Paso, Texas, un oficial le pidió la documentación y le dijo que su hijo «no se parecí a ella», cuenta en uno de los testimonios que recoge el informe de 2022 de Bnhr, según AFP.
«Me preguntó, ‘¿cómo comprobamos que es tu hijo? Tendríamos que hacer una prueba ADN y eso llevaría una semana'». «Por eso dijo que iban a llevar a mi hijo a un lugar de detención. Le pregunté a dónde (…) me dijo burlándose: ‘a una jaula'».
«Una de las agentes (…) se llevó a mi hijo. La otra mujer agente me inspeccionó minuciosamente. Me puso contra la pared y me dijo que bajara mis pantalones hasta las rodillas. Revisó físicamente todo mi cuerpo. Puso sus manos debajo de mi sostén y tocó mis partes por delante y por detrás», describió la mujer.
El director de la red, Fernando García dijo que encontraron un patrón «muy preocupante» de registros corporales y de cavidades hacia las mujeres y subrayó que todos los casos documentados fueron falsos positivos.
Otra mujer también denunció un caso similar: «me gritó que levantara las manos, me puso contra la pared y comenzó a inspeccionarme y tocar mis partes íntimas. Golpeó mi muslo izquierdo y me gritó que abriera más las piernas. Me preguntó si había algo en el medio, refiriéndose a mi vagina, y dije que no».
Del 9 de octubre al 9 de noviembre de 2021 la organización habló con 4.000 personas en 80 puestos instalados desde Las Cruces, en Nuevo México, hasta San Elizario, en el extremo este del condado de El Paso, en puentes internacionales que sirven de puntos de entrada, supermercados, asociaciones, restaurantes, mercados, iglesias y parques.
De los 25 casos documentados, 16 involucran a agencias federales de inmigración en la frontera e «ilustran violaciones muy preocupantes de los derechos civiles, los derechos humanos y la violación de la dignidad personal».
Un hombre de 71 años relató cómo fue empujado al piso por uno de los agentes porque se equivoco al entregar su documentación. Le entregó la tarjeta de elector mexicano en vez de el pasaporte y el agente «le aventó (…) y cayó de espalda. La mayoría de las veces me han tocado agentes muy amables, agentes que aman su trabajo y esta vez fue bastante rudo conmigo».