Rusia pide que no se le suministre más armamento a Ucrania
Moscú.- El ministro ruso de Defensa, Serguéi Shoigú, pidió hoy a Occidente que contribuya a la desescalada de las tensiones en Europa y que los países dejen de suministrar armas a Ucrania.
«Por nuestra parte, también nos gustaría proponer contribuir a reducir esta tensión y dejar de atiborrar de armas a Ucrania. Vienen de todos lados, se está haciendo públicamente. Se está haciendo de manera demostrativa. No está del todo claro por qué», señaló el titular de Defensa al inicio de su reunión con su homólogo británico, Ben Wallace.
Shoigú pidió además al ministro británico de Defensa que le explique por qué el Reino Unido envió «sus fuerzas especiales a Ucrania y cuánto tiempo estarán allí».
El Reino Unido provee a Ucrania de nuevo armamento para incrementar su «capacidad defensiva», según ha explicado Londres, y además ha enviado durante un corto periodo de tiempo personal a Ucrania para acondicionar el nuevo armamento suministrado y llevar a cabo tareas de formación.
El ministro ruso de Defensa sostuvo ante Wallace que la situación en el continente europeo es cada vez más tensa, pero que no es culpa de Rusia.
«Estoy encantado de que usted haya venido a Moscú, al Ministerio de Defensa de Rusia. La situación militar y política en Europa es cada vez más tensa y no es nuestra culpa para nada», señaló.
Dijo que Rusia no entiende siempre del todo las razones detrás de la escalada de esas tensiones, pero aún así ve cómo aumentan.
Rusia acumula desde hace meses en la frontera con Ucrania más de 100.000 soldados y ha iniciado esta semana unas maniobras conjuntas con Bielorrusia a pocos kilómetros de Kiev que han fomentado los temores de Occidente a un ataque ruso inminente contra territorio ucraniano.
Shoigú expresó su deseo de que sea posible abordar con Wallace «temas urgentes sobre la reducción de esas tensiones», así como la propuesta rusa dirigida en diciembre a la OTAN y a Estados Unidos para que haya unas garantías de seguridad vinculantes de que la Alianza Atlántica no se expandirá más al este y no se emplace armamento ofensivo cerca de las fronteras rusas.
EEUU y la OTAN ya han respondido el mes pasado a Rusia a esas propuestas y descartan cambiar la política de puertas abiertas de la OTAN, pero admiten la posibilidad de reanudar el diálogo en el Consejo Rusia-OTAN y sobre el control de armas y ejercicios militares.
«Hemos revisado todo y creo que nuestra respuesta seguirá en breve», Shoigú.
Recordó que ésta es la primera reunión entre dos ministros de Defensa de Rusia y el Reino Unido en varios años, y lamentó que el nivel de la cooperación sea «cercano a cero» y está a punto de «volverse negativo», al igual que «la temperatura de las relaciones entre Rusia y los países de la OTAN».
Según Shoigú, actualmente se está prestando cada vez más atención «exorbitante» a temas que, en opinión de Moscú, «podrían resolverse con bastante calma, en un diálogo entre todos los países, sin la amenaza de imponer ciertas sanciones».
Dijo con ironía que no quedan palabras en los diccionarios de inglés o ruso acerca de los calificativos que Occidente pone a las sanciones que enfrentaría Rusia en caso de un ataque contra Ucrania: «catastróficas, masivas, destructivas», entre otras muchas.
«Desafortunadamente, vemos (en cada visita a Moscú) amenazas de sanciones en cada discurso. No me gustaría que nuestra conversación de hoy vaya por esta línea», indicó. EFE