Enseñar cine en comunidades vulnerables: Un proyecto de transformación social en Nueva Esparta

Hacer trabajos en comunidades vulnerables no es tarea fácil en un país con una severa crisis humanitaria y donde los ciudadanos procuran resolver el día a día para sobrevivir. Sin embargo, siempre hay personas que apuestan por el cambio, por mostrar lo positivo, pese a las dificultades.

Este es el caso del joven Emir González, quien desde hace 7 años decidió adentrarse en los sitios menos favorecidos de Nueva Esparta para enseñarle a los niños y jóvenes herramientas para hacer cortometrajes, además de aprender fotografía, dirección y edición con teléfonos celulares.

Foto: Emir González

El equipo de ND conversó con González hace poco. Dice que él y su equipo tratan de mostrar las cosas buenas que hay en el país y “enviar mensajes de transformación social, de cambio e impulso de cosas buenas que se pueden hacer y se han perdido con el tiempo. Trabajamos enmarcados en transmitir valores”, dijo.

¿Cómo llevan a cabo esta actividad?

“Cuando vamos a una comunidad hacemos los enlaces con las personas líderes de estos sectores que llevan la data de los niños y jóvenes o, tienen el conocimiento de algunas personas con iniciativas. A través de los contactos realizamos una reunión donde vemos qué tenemos y con qué contamos y, partiendo de allí buscamos un espacio abierto –por el contexto de la pandemia- acorde para realizar estas actividades: un patio, una casa cultural”, cuenta.

González dice que posteriormente revisan el grupo etario y luego coordinan un cronograma de actividades para así adaptar los conocimientos “que no se aprenden de un día para otro, como lo es la fotografía” y señala que procuran adaptar la metodología a un lenguaje sencillo y con practicidad.

Foto: Emir González

Al finalizar el proyecto, pide que sean ellos mismos (los integrantes) que produzcan el cortometraje donde todos puedan participar, bien sea como directores, actores, actrices, pero que al final estén involucrados.

¿En cuáles ciudades han llevado esta labor social?

“Trabajamos en Nueva Esparta. Tratamos de tocar las comunidades más vulnerables, en sectores donde no llega la cultura. A personas que son muy humildes tratamos de brindarles esa oportunidad de que conozcan algo nuevo. Hemos ido a Bella Vista, Punta de Piedra, Los Cocos, y dentro de estos sectores y hemos conseguido situaciones difíciles de niños que no tienen comida, ni ropa, pero dentro de nuestro proyecto y grupos de amigos recogemos fondos para ayudar. Aparte, llevar cultura y cine es un poquito de alegría palpable para que ellos sientan que también brindamos atención social”.

González cuenta que una de las cosas más difíciles es que han encontrado situaciones en que «hay personas que se dedican a las cosas malas y enlazamos con ellos para que nos permitan el uso de los espacios”.

Además, dice que dentro de estos sectores vulnerables, quienes se dedican a la mala vida, los cuidan y cuidan sus equipos. “Muchos de sus hijos participan con nosotros. Esas personas que se dedican a hacer cosas al margen de la ley no se meten con nosotros y tratamos de incorporarlos a  nuestro proyecto audiovisual a futuro y puedan crear una mejor Venezuela”.

¿Qué te inspiró a hacer este tipo de labor?

Este profesional de la fotografía no contó con el apoyo suficiente para llegar a donde está actualmente. Por eso, buscó la manera de ofrecer sus conocimientos a aquellos que no tienen recursos. “Sé que en cada comunidad hay un Emir, un Simón Díaz, un cantante, una actriz, un actor extraordinario que no tiene la oportunidad de proyectarse. Desde ese punto me inspiro a hacer lo que hago y que sientan que sí pueden a través de lo que tengamos a la mano”.

¿Cuáles han sido las experiencias más satisfactorias y las menos satisfactorias con esta actividad en las zonas más pobres?

“Una de las experiencias más satisfactorias es que encontramos el “gracias por estar aquí y enseñarnos algo nuevo y productivo”. González resalta que ver en sus caras la alegría en una película o cortometraje en una proyección comunitaria, no tiene precio.

“Es una experiencia nutritiva, única y  nos llena de gratitud, orgullo y amor y con ganas de seguir aprendiendo y haciendo”, agrega.

Foto: Emir González

Si una comunidad que atiende a niños de escasos recursos y desea llevar tu labor hacia esa zona, ¿cómo haría para contactarte?

Quienes deseen contactarnos, lo pueden hacer a través de:

Emir_audiovisuales (Instagram), emirgonzalez (Facebook) y en WhatsApp: 04140865190.