La activación del RR a Maduro sin un acuerdo político estaba destinada al fracaso, aseguran expertos
Para los analistas de la firma Carpe Diem, la activación del referendo revocatorio a Maduro este año, sin que pasase previamente por un acuerdo político, “estaba condenada al fracaso”, aunque no deje de sorprender que el oficialismo elimine “la posibilidad de la consulta popular en siete días contrastando las trabas burocráticas y legales” que ocurrieron en el año 2016, reseñó el portal Diario Las Américas.
A juicio del consultor político Oswaldo Ramírez, quien está en el poder, decidió ponerle freno a una consulta que permitiera repetir un escenario como lo que pasó en el estado Barinas. “No hay posibilidades de elecciones hasta 2024” y que además, la oposición “subestimó” al Consejo Nacional Electoral de ofrecer una respuesta rápida a la petición del referendo, pues pensaron que la respuesta sería tardía.
Los analistas que conforman la firma Carpe Diem señalan que “aunque ningún dirigente nacional del llamado G4, ni del Gobierno Interino, había avalado públicamente la idea del revocatorio, todo estaba preparado en las filas de la oposición para utilizar la sesión especial de la Asamblea Nacional para conmemorar el 23 de Enero de 1958 [fin de la dictadura de Pérez Jiménez] y anunciar el respaldo, especialmente por parte del partido Voluntad Popular, a la consulta popular de mandado”.
Además, consideran que para la oposición no era fácil desprenderse de la iniciativa del Movimiento Venezolano por el Revocatorio (Mover), porque dicha consulta para revocar a Maduro del mandato, contaba con apoyos considerables dentro del sector opositor y “el proceso de convocatoria permitía volver a enarbolar la estrategia de cambio inmediato que se utiliza desde 2019, además de generar hitos políticos y de presión de calle”, reseña el portal.
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