Patricia Valenzuela: Hoy más que nunca se debe usar la mascarilla, espacios ventilados y evitar multitudes

Hace aproximadamente tres semanas Nicolás Maduro ordenó el inicio de la vacunación contra el coronavirus para menores de edad con el candidato vacunal de origen cubano Abdala. Sin embargo, a varios niños y adolescentes les han aplicado la Sinopharm, aprobada por los organismos científicos internacionales.

La médico infectólogo e internista, Patricia Valenzuela, destacó que ya no cabe duda de que los niños, niñas y adolescentes deben ser vacunados y que se deben aplicar aquellas dosis ya aprobadas por la Organización Mundial de la Salud y revistas científicas de impacto porque esto siempre se ha hecho “indiferentemente del laboratorio que las produzca” y resalta que si una mamá o papá acepta que a su (s) hijo (s) les sea aplicada la Abdala, deberán contar con un consentimiento en donde se les explique a los padres ese ensayo donde serán incluidos sus hijos y la vigilancia posterior que deben tener al incluirlos en este protocolo.

No obstante, la doctora aprovechó la ocasión para recordar que ante la nueva variante detectada en Sudáfrica, ómicron, el patrón de transmisión es igual que sus antecesoras variantes: a través de gotas de saliva, hablar en voz alta, estornudos, cantar, reír. “Para evitar la transmisión hay que tener dos pilares importantes: las medidas de bioseguridad, uso de mascarillas, espacios ventilados, evitar multitudes y acudir a los centros de vacunación”, expresó a Circuito Éxitos este jueves 2 de diciembre.

Ante ello, resaltó que en el país están las vacunas de origen chino, Sinovac y Sinopharm, ambas  “con plataformas de acción de virus inactivo y que es una vía que conocemos de las vacunas de la serie primaria de nuestros hijos, puesto que tienen efectos adversos bajos. Hemos tenido ensayos y publicaciones en revistas científicas que las vacunas chinas en grupos de niños a partir de los tres años de edad son recomendadas y están incluidas en el uso de emergencias de la OMS”, dijo.

Valenzuela resaltó el mecanismo de vacunación en países como Chile, Argentina, Uruguay e inclusive en la misma China, en donde se han aplicado las dosis a los menores de edad y que han tenido efectos secundarios muy bajos.

“Dejar a los niños sin vacunación, significa que el virus seguirá circulando entre ellos y mientras esto siga entre las personas aparecerán variantes porque se replican como las que hemos visto hasta ahorita”, destaca.

Hace poco las cadenas de farmacia se sumaron como centros de vacunación y la especialista en infectología considera que éstos son buenos puntos de vacunación porque los considera seguros tanto por sus estructuras como por el respeto y cuidado en las cadenas de frío.

“Recomiendo a los padres que lleven a sus niños a vacunarse pero no debemos olvidar que todavía tenemos adultos que no lo han hecho y el llamado es a vacunar a todo el grupo familiar”, puntualizó.