Indira Urbaneja: Políticos deberían convocar a un proceso de negociación serio en el primer trimestre de 2022
La analista política y CEO de Reunificados, Indira Urbaneja comentó este lunes que la oposición debe interpretar los resultados de sus últimas acciones y debe llamar a un proceso de negociación «serio» porque el país está cansado de tanta «habladera» y quiere estabilidad política, social y económica.
«El mensaje que le ha dado la sociedad a la clase política es claro. A pesar del fatalismo al que se ha jugado, desde llamado a intervención, gobierno interino, guarimbas, elecciones, hasta confrontaciones; la gente ha demostrado que el país no se ha acabado con ninguno de estos procesos (…) Esa clase política debería aprovechar a toda una sociedad que se niega a fallecer y debería, el primer trimestre del año (2022) llamar a un proceso de negociación», declaró en Primera Página según reseñó nota de prensa.
«Los ciudadanos no quieren más habladera que no lleguen a ninguna finalidad, sino que por el contrario anhelan que se produzca un proceso de diálogo y entendimiento que ayude a consolidar el leve crecimiento o estabilización económica que vive el país. La prioridad debe ser brindar a los venezolanos la estabilidad social, política y económica que tanto necesitan», agregó.
A su juicio, no debe negarse que este año -2021- el país vivió un «repunte», que se evidencia principalmente en el tema comercial, pero, el país debe apuntar al crecimiento productivo para no estancarse en «una economía de puerto o una economía de bodegón».
Comparando a la situación actual con un avión que venía en caída libre y logró estabilizar su ruta, Urbaneja añadió que «tenemos que pensar que lo único que realmente permite a un país avanzar es la producción y la generación de empleo. Para ello se necesita inversión extranjera que va asociada a las condiciones surgidas de la política».
Además, refirió al tema de las sanciones internacionales y estimó que -si bien no han sido contra el sector privado-, si lo han afectado por lo que define como el «sobrecumplimiento» de estas medidas. «Empresas extranjeras toman previsiones de comercializar con firmas venezolanas por temor a represalias por parte de la administración norteamericana, esto a su vez genera una trama de triangulación que eleva los costos pagados por los venezolanos».
«Las sanciones cada día son menos efectivas y lo que hacen es generar sufrimientos a los pueblos (…) al final del día los comerciantes siempre se la van a ingeniar para comercializar y generar ingresos buscando la forma de pasar las sanciones por debajo de la mesa».