Rafael Uzcátegui (PPT): Si el CNE hubiera mejorado actuaría contra el Estado que comete delitos electorales
Rafael Uzcátegui, candidato de la Alianza Popular Revolucionaria – disidencia chavista – a la alcaldía del municipio Libertador aseveró que Nicolás Maduro le tiene terror a que pueda ganar la «verdadera izquierda» y por eso aplica inhabilitaciones como venganza.
En entrevista concedida a Tal Cual, Uzcátegui condenó el tema de las inhabilitaciones y recordó que el ventajismo es un delito. «La venganza política, el ventajismo, el usar el poder para darle ventajas a sus candidatos, no solamente es rechazable, condenable, sino que es un delito. Quienes actúan así se colocaron en el camino de la delincuencia electoral».
Uzcátegui agregó que si el CNE hubiera mejorado, actuaría «de manera firme contra el propio Estado, porque es desde el Estado desde donde se han promovido todos los actos de delincuencia electoral».
«Inhabilitar sin ninguna fundamentación, legalidad o apoyo en la justicia y la constitución, es un acto de delincuencia electoral. Son delincuentes electorales quienes los han promovido y quienes lo hacen. Y los tribunales de la república, si actuaran con autonomía, actuaran contra los delincuentes electorales».
Se han producido más inhabilitaciones contra disidentes del chavismo que contra la oposición…
— La venganza política está en, precisamente, cercar, evitar que la izquierda sea izquierda, que se conduzca con sus valores universales; que se conduzca apoyando y sirviendo al pueblo. Ese es el gran terror de quienes desde Miraflores promueven la delincuencia electoral, el terror de que la izquierda resurja con la fuerza de la ética, la honradez y decencia, evitando que tenga candidatos y que tenga partidos. Hoy, un partido de derecha, un partido corrupto, un partido sin principios es inmediatamente legalizado, mientras que, si actúas en el camino de la ética, no tienes posibilidades de tener partido, te inhabilitan, suspenden o montan cualquier triquiñuela jurídica para impedir tu existencia.
Además, aseveró que el 21N servirá para que entré en juego un nuevo cuadro político. «Será la esperanza, aquella vieja esperanza del 21 de noviembre de 1957, de hace 64 años cuando se convocó a una huelga en las universidades públicas que alentó la asonada militar, la respuesta militar del 1° de enero de 1958 y el llamado de los trabajadores caraqueños al paro general del 21 de enero de 1958, fechas todas que vamos a conmemorar porque están signadas por el proceso electoral».