Después del 21N, oposición debe buscar un mecanismo para que haya unidad y no varias oposiciones: Raniero Cassoni
Raniero Cassoni, analista y consultor político, explicó este viernes las consecuencias que traerá para la oposición ganar o perder espacios en las elecciones regionales del domingo y opino que luego de los comicios, los diversos grupos de opositores deberán buscar un mecanismo para que haya verdadera unidad rumbo a las presidenciales de 2024.
En entrevista concedida a Tv Venezuela, Cassoni dijo que uno de los errores que ha cometido la oposición es no reconocer que hay otros grupos que también se oponen al chavismo. «No reconocer al adversario que no es tu enemigo, sino que es normal que haya conflictos internos. Pero en este momento, estamos ante un escenario distinto porque nos enfrentamos a un régimen o un gobierno de facto que es capaz de cualquier cosa para mantenerse y la oposición está luchando entre ellos mismos, por unos puestos que no van a resolver los problemas inmediatos de la población».
«En estas elecciones, la oposición se juega dar paso a una nueva redimensión del cuadro político. De ahora en adelante, no vamos a tener las mismas condiciones que tenía el G4 o la MUD, y van a tener que buscar un mecanismo para que haya unidad y se va a requerir de todos y no la división de varios grupos», subrayó.
En este orden de ideas, el politólogo egresado de la UCV, lamentó el caso Miranda y la diatriba generada entre Carlos Ocariz y David Uzcátegui. «Hasta última hora hubo una disputa que no invitó a la unión, a la unidad, donde reproches continuaron aún después del acuerdo. No hubo unidad, sino un conflicto y pese a que es normal la disputa, hay estados donde probablemente no ganará la oposición del G4 y debido a esta falta de unidad, no habrá reconocimiento de los líderes como es el caso de Táchira con Laidy Gómez o en Lara con Henry Falcón».
También, refirió a «lo que se juega el chavismo» y destacó que Maduro a través de la victoria de los candidatos del Psuv buscará reconocimiento internacional y lavarse la cara internacionalmente, pese a que no son las elecciones que espera el mundo porque no hay condiciones electorales y políticas y además, se paralizó la negociación entre delegados de Maduro y delegados de la Plataforma Unitaria vinculada a Juan Guaidó.
«La oposición va camino hacia un cierre, el cierre de un ciclo político, como lo hizo en su oportunidad la MUD; tendrá que plantearse otros mecanismos que no sea nada más la vía electoral, y tendrá que buscar un proyecto a largo plazo», comentó.
El chavismo y la oposición, que acude a las urnas por primera vez desde 2017, cerraron este jueves la campaña electoral para las elecciones del 21N, apurando los últimos momentos para reclamar el voto a sus simpatizantes, un desafío especialmente complejo para los antichavistas. En redes sociales criticaron que el chavismo no cumplió protocolos de bioseguridad contra el coronavirus.
La última jornada de campaña fue testigo de una escena que hace años se antojaba inédita, chavistas y opositores -sin líderes- pidieron el voto y repartieron panfletos unos frente a otros en varias zonas de la gran Caracas, sin problemas entre ambos grupos.
En un gran acto celebrado por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) en el estado Miranda, que alberga parte de Caracas, la vicepresidenta Ejecutiva, Delcy Rodríguez, aseguró que los comicios servirán para dar una «lección democrática, para que los imperios del mundo aprendan a respetar a Venezuela».
«Ellos (la oposición) saben que le vamos a dar una paliza este 21 de noviembre», afirmó Rodríguez, quien insistió en que mantendrán el legado del fallecido presidente Hugo Chávez tras la contienda electoral.