Rafael Narváez: Así le cambien el nombre, el Sebín y Dgcim seguirán siendo asociadas con las torturas más horrendas
El abogado defensor de DDHH Rafael Nárvaez reaccionó este viernes al cambio de fachada que se le hizo al Sebin del Helicoide y dijo que así cambien el nombre del centro de reclusión y de la Dgcim, ambos serán recordados como «cuna de las torturas más horrendas contra presos políticos».
«Sebin y Dgcim han sido centros de torturas y asesinatos de Albán y Acosta Arévalo, pintar las fachadas no cambia nada. El Estado pretende borrar con un solo brochazo los gritos de dolor, torturas, tratos crueles e inhumanos y degradantes, vejaciones, ejecutados por funcionarios del SEBIN y DGCIM contra los presos políticos», declaró según reseñó nota de prensa.
La abogada y defensora de DDHH, Tamara Sujú denunció este jueves que la administración de Nicolás Maduro disimula el centro de reclusión de El Helicoide con una pancarta titulada “Centro de Procesados y Penados, Área Metropolitana de Caracas 1, máxima seguridad”. A su juicio, se trata de un «disfraz» a las «celdas de tortura que durante 20 años han albergado a los presos políticos» de ese centro de detención que pertenece al Sebin.
Al respecto, Narváez fustigó que «el Estado pretende cambiar denominación de los centros de detenciones para presos políticos, colocando el nombre de centros para procesados y penados, olvidando que la «tumba» fue creada por funcionarios del Sebin para encerrar a detenidos, aplicándole todo tipo de torturas, infligiendo tratos crueles e inhumanos y degradantes, desaparición forzada, negación del debido proceso (…)».
Recordó que en esos centros del Sebin, «fueron asesinados el concejal Fernando Albán y Acosta Arévalo por torturas, golpizas, descargas eléctricas y vejaciones al estilo Nazi como lo han catalogados diferentes países» y agregó «es imposible borrar tanto horror, tanto dolor y sufrimiento de familiares y víctimas de violaciones graves a los DDHH y crímenes lesa humanidad por parte del Estado contra miles de ciudadanos que manifestaron su descontento y la repuesta a la solución fue lanzarle el «Plan Zamora «con represión, balas y cárcel».
Asimismo, dijo que «pareciera que los responsables de estos crímenes desconocen los informes actualizados por parte de la alta comisionada para los DDHH de la ONU, Michelle Bachelet, el informe de la misión independiente de determinación de los hechos de la ONU y por supuesto lo que actualmente el expediente que procesa la CPI contra el Estado por crímenes de lesa humanidad».