Cuba permitirá empresas privadas nacionales, pero solo pequeñas y medianas y de capital local
Cuba permitirá la creación de pequeñas y medianas empresas, pese al deterioro de su economía y una crisis sanitaria fuera de control a causa del coronavirus, reseñó el portal El Nuevo Herald (ENH) este miércoles 25 de agosto.
No obstante, quienes podrán ser dueños serán los ciudadanos cubanos en la isla, pero no los que están fuera del país.
«Los cubanos no han podido ser dueños de un negocio desde 1968, cuando el gobierno de Fidel Castro confiscó los últimos establecimientos que aún estaban en manos privadas, desde bodegas hasta puestos de fritas. Cinco décadas después, la mayoría de las empresas estatales están en quiebra, la producción agrícola e industrial se ha desplomado y la escasez generalizada de alimentos, medicinas y productos básicos son la fachada pública del socialismo cubano», detalló ENH.
John Kavulich, quien se ha desempeñado desde hace varios años como presidente del U.S.-Cuba Trade and Economic Council, expresó que con el solo hecho de «que hayan hecho esto, sabiendo lo doloroso que es para algunas de las personas del Partido Comunista, es enorme» y aseguró que existen «pocas admisiones que el gobierno cubano podría hacer que demuestren mejor el fracaso de su sistema que este anuncio».
El gobierno cubano también autorizó cooperativas en algunas actividades distintas de la agricultura, aunque se lean como políticas transformadoras de cambios, existen limitaciones, siendo una de ellas que los cubanos que están fuera de la isla, no podrán ser propietarios.
Esto, según el Decreto Ley 46 publicado hace una semana que indica que los propietarios podrán ser propietarios de empresas de hasta 100 socios y empleados, organizadas como Sociedades de Responsabilidad Limitada (SRL) y que solamente aquellas personas que residen permanentemente en la isla pueden ser socios.
El anuncio que excluye a los cubanoamericanos y los cubanos que viven en otros países se produce después de que una funcionaria del gobierno dijo al ENH que la isla estaba abierta a la inversión cubanoamericana.
“Esto es un balde de agua fría”, dijo el abogado Pedro Freyre, quien asesora a empresas con negocios en Cuba y ha abogado por la expansión del sector privado de la isla. “Uno de los problemas fundamentales de la economía cubana es su falta de capital. Uno de los principales propósitos de esta estructura empresarial es la captación de capital. Si solo los cubanos que viven en la isla pueden ser socios y no tienen dinero, ¿de qué te sirve?”.
Según expertos, están impresionados por la modernización de algunas leyes cubanos, cuyo propósito pretende hacer un «reconocimiento al modelo de Sociedad de Responsabilidad Limitada estadounidense», pero señalan que todavía persisten restricciones y controles.