Silencio y neutralidad, la estrategia de la contraparte en México
Únicamente el régimen versiona las llamadas negociaciones de México. La contraparte guarda un silencio trastocado en inevitable sospecha.
El uno apuesta a neutralizar las disidencias. Y la otra también.
Evitan los costos políticos con la confusión. Ambos prefieren a muchos ni-níes que no pregunten y acaten.
No es posible ser neutrales al dispararles a los principios y valores que nos sostienen. Pero la estrategia comunicacional está orientada a sembrar el miedo de tomar posiciones e incrementar una fe religiosa en las diligencias hechas.
El miedo se nota en las redes sociales. Y el ejemplo es que demasiados prefieren un like antes que un retweet que comprometa el reino de la confusión convertida en neutralidad.