Expulsiones fronterizas hechas por Estados Unidos preocupan a la ONU
La Agencia de la ONU para los Refugiados, Acnur, está preocupada por las acciones de expulsión a refugiados y migrantes que está ejecutando Estados Unidos hacia México, bajo razones de salud pública.
Matthew Reynolds, representante regional de Acnur para EE.UU. y el Caribe, señala que dichos vuelos de expulsión “de no mexicanos al interior profundo de México constituyen una nueva y preocupante dimensión en la aplicación de la orden de salud pública relacionada con el Covid-19”.
Acotó que las personas o familias que van a bordo de esos vuelos y que puedan «tener necesidades urgentes de protección corren el riesgo de ser devueltas a los mismos peligros de los que han huido en sus países de origen en Centroamérica sin ninguna oportunidad de que se evalúen y atiendan esas necesidades».
Esta expulsión de EEUU al sur de México, aumenta el riesgo de devolución en cadena, es decir la devolución por parte de sucesivos países de personas vulnerables en peligro, lo que contraviene el derecho internacional y los principios humanitarios de la Convención de Refugiados de 1951.
«Todos los gobiernos tienen la obligación de defender estas leyes y principios en todo momento», recordó Reynolds.
Recientemente, ACNUR lanzó una advertencia global contra las iniciativas que trasladan las responsabilidades de asilo a otros países o que dan lugar a la denegación total del derecho a solicitar protección, sobre todo en un momento en el que el movimiento de solicitantes de asilo y migrantes en la región ha aumentado de forma significativa, estas expulsiones pondrán a prueba la sobrecargada capacidad de respuesta humanitaria en el sur de México.
Además, rescató Reynolds que dichas acciones aumentarán el riesgo de transmisión del Covid-19 a través de las fronteras nacionales y son contrarios a los pasos que se están dando para compartir la responsabilidad entre los países de la región a la hora de abordar las causas fundamentales del desplazamiento forzado y la migración.
ACNUR ha mantenido desde el inicio de la pandemia de Covid-19 que la protección de la salud pública y la garantía del acceso al asilo son totalmente compatibles. Incluso en los casos en los que el coronavirus se ha disparado, muchos países han puesto en marcha protocolos eficaces, como exámenes sanitarios sistemáticos, pruebas y medidas de cuarentena, que han protegido simultáneamente y con éxito tanto la salud pública como el derecho humano a solicitar asilo.
Por este motivo, la Agencia de la ONU reitera el llamamiento realizado en mayo de 2021 por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, para que el Gobierno de los Estados Unidos levante lo más pronto posible, las restricciones de asilo relacionadas con la salud pública del Título 42 y restablezca el acceso al asilo para las personas cuyas vidas dependen de él.
Estas expulsiones fronterizas en virtud del T42, comenzaron en marzo de 2020 durante la administración del ex presidente Donald Trump.
El representante de Acnur también recordó que la Agencia está dispuesta a apoyar a EEUU, México y a todos los países en las acciones que salvaguardan la salud pública de manera efectiva sin sacrificar el derecho básico de cualquier persona que huye de la guerra, la violencia o la persecución, a acceder a un territorio seguro y a procedimientos de asilo humanos, con prontitud y sin obstrucción.