AP: La democracia nada contracorriente en un mundo autoritario
Durante los últimos meses, los dictadores han crecido en número y han demostrado la fuerza sin medias tintas, mientras la libertad retrocede: una draconiana persecución en Nicaragua, una sangrienta represión en Myanmar, un aumento del control de Beijing sobre Hong Kong, pero esto empezó hace mucho tiempo.
Un reporte de AP recogió una larga serie de países donde el sistema democrático se ha abandonado o restringido, o donde los líderes elegidos de forma democrática no ocultan su autoritarismo. A finales del siglo XX y principios del XXI, varios países hicieron la transición hacia gobiernos democráticos, mientras la Unión Soviética se derrumbó. Los países del este de Europa controlados por Moscú se independizaron. En América Latina, décadas de dictaduras militares dieron paso a elecciones. Una oleada de democratización recorrió África, desde Sudáfrica a Nigeria o Ghana.
“Tuvimos el mayor número de democracias jamás existente en el mundo”, dijo Sheri Berman, profesora de ciencias políticas en la Facultad Barnard, Universidad de Colombia. Pero apenas unos años más tarde, empezaron las complicaciones. Quizá el mundo fue demasiado optimista: “Hace falta mucho para que la democracia funcione”, agregó Berman.
«El experimento de Rusia con la democracia fue breve tras el colapso de la Unión Soviética. Un penoso nivel de vida, la debilidad del liderazgo de Boris Yeltsin y las disputas entre empresarios sin escrúpulos y nuevos oligarcas por controlar las empresas estatales allanaron el camino a Vladimir Putin. Entonces, llegó la crisis financiera de 2007-2008, que se hizo sentir en todo el mundo. En EEUU, los bancos se vieron al borde de la quiebra. En la UE, los problemas de EEUU contribuyeron a una deuda de crisis que arrastró a un país tras otro».
Esos problemas financieros, combinados más tarde con las tormentas políticas del gobierno de Donald Trump y las agrias negociaciones sobre la salida británica de la UE, hicieron que la democracia liberal pareciera una apuesta arriesgada. “Cuanto más atractivos se ven Estados Unidos y Europea, mejor es para la gente que lucha por la democracia”, dijo Berman; pero lo contrario también es cierto.
Un estudio del Pew Research Center en 2019 sobre 34 países mostró una mediana de un 64% de gente que creía que los cargos electos no se preocupaban por ellos. Hace 80 años había quizá 12 democracias plenamente funcionales. Hoy, el Índice de Democracias de la Economist Intelligente Unit enumera 23 democracias plenas, y casi la mitad del planeta vive en alguna forma de democracia.