Habitante de la Cota 905, a Efe: No apoyamos a las bandas, pero entiendan que estamos en guerra
Decenas de caraqueños residentes en las zonas más afectadas por los tiroteos que azotan la capital en los últimos dos días salieron este viernes de sus casas en búsqueda de refugios para huir de las balas que han ocasionado un número todavía no determinado de víctimas.
La organización Otro Enfoque abrió las puertas de su sede para darle hospedaje a cerca de 30 niños y jóvenes que habitan en la zona más roja de la violencia armada en la capital, la Cota 905, a los que apoyan desde hace dos años.
La medida fue tomada debido al conflicto que comenzó en la tarde del miércoles en varias zonas de Caracas, donde la Policía mantiene un operativo para desmantelar a los grupos armados.
La trabajadora social de la ONG Carolina Terán contó a Efe que los jóvenes «vieron» cómo los grupos armados le «disparaban a la gente».
«Pudieron ver cómo bajaban algunos heridos (…) Entonces ellos están muy nerviosos y, desde las 6 de la mañana, empezaron a salir de la comunidad», agregó.
Por ello, habilitaron un refugio en su sede, ubicada en una zona segura, para los 30 jóvenes que ayudan, debido a que «muchos de ellos tienen distintas realidades, no tienen familia o los papás no están acá, en Venezuela».
Según Terán, varios de estos chicos habitan en viviendas con condiciones «precarias» y otros se encontraban en «situación de calle».
El miedo
La mayoría de ellos se niega a hablar y evita el tema, pero Terán indicó que, en el momento de su llegada a la sede de la ONG, se encontraban «muy asustados».
Solo una joven mayor de edad pudo narrar a Efe cómo salió esta mañana de la zona.
«Salí por (el sector de) El Paraíso, pero bajé normal por ahí, ya no había tiroteo», explicó la joven que prefirió resguardar su identidad.
Sin embargo, señaló que en este momento la situación es «complicada» y asegura desconocer por qué se presentan estos tiroteos.
«Yo me siento bien en la Cota, pero cuando se arman esos tiroteos, así no, hasta yo me quedé (en medio de) plena balacera (…) Arranqué a correr para otro lado pero después me estaba riendo como si nada», indicó.
Entretanto, otro joven, que se refugió en otra zona de Caracas y que buscó ayuda por sus propios medios, comentó Efe que logró salir del lugar «al mediodía».
«Violaciones garrafales»
Vive en una de las zonas que está «en guerra», según describió sin dar detalle, pero aseguró que huyó a otro sector de la capital ante lo que ha considerado como «violaciones garrafales» de seguridad.
Según denuncia el joven, que prefiere no desvelar su identidad, una persona cercana a su sector fue secuestrada por delincuentes que piden a cambio de liberarla la presencia de fiscales públicos.
«Entiendan que no es que la gente los apoye, es que estamos en una situación de guerra, literalmente», y agregó que los delincuentes «se han metido muchísimo a las casas».
«Estoy demasiado preocupado», continuó el joven, quien espera que la Fiscalía llegue rápido al lugar.
«El miedo que me da es que ese vaya a ser el ‘modus operandi’ que vayan a usar ahora de meterse así (…) Si yo estoy afuera y estoy que exploto, imagínate la gente que está adentro», agregó.
Incursión de cuerpos policiales
Desde otro sector que linda con la barriada, otro hombre, también en anonimato dijo a Efe que, «hay efectivos (policías) que han entrado a las casas» a robar.
Denuncia que «a una señora le quitaron el router» y a otra familia «les han quitado dólares», mientras que «en otras casas se dedican a ver si hay alguien, voltean la casa y salen de nuevo».
La Policía se mantiene desplegada desde las primeras horas de la mañana de este jueves y, hasta el momento, no ha ofrecido un balance de víctimas, daños o delincuentes abatidos o detenidos.
El presidente Nicolás Maduro ha afirmado que los cuerpos de seguridad están actuando de forma «contundente» en la capital para garantizar la seguridad.
Las autoridades publicaron el jueves algunas fotografías con los nombres de algunos líderes de estas bandas con recompensas que van de los 50.000 a los 500.000 dólares.
Entre ellos, está Carlos Luis Revete, alias «el Koki», Garbis Ochoa Ruiz, alias «El Galvis» y Carlos Calderón Martínez, alias «El Vampi», todos ellos acusados de asesinato. EFE