Gerardo Blyde desmiente que se vaya a suspender proceso ante la CPI por negociación en México
Gerardo Blyde, quien encabezó la gira internacional de la oposición para promover el Acuerdo de Salvación Nacional, ofreció detalles sobre la negociación que desde hace semanas se lleva a cabo entre delegados de Maduro y Guaidó; y desmintió que durante este proceso se plantee suspender el caso en la CPI.
En entrevista con Román Lozinski, Blyde aclaró varios puntos sobre el acuerdo y subrayó que en el comunicado conjunto de EEUU y la UE «los dueños de las sanciones -no la oposición- dicen que las sanciones pueden ser levantadas si se van alcanzando metas dentro de la negociación. Si esto no sucede no se levantarán las sanciones».
«La otra cosa que tengo que desmentir es que en un proceso como este pudiese suspender o negociarse el proceso de la CPI; eso no es cierto porque cuando una víctima acude a la justicia internacional es porque el sistema interno no puede impartir justicia, porque no hay separación de poderes (…) esto no se puede negociar porque no somos las víctimas en ese juicio, estas son los dueñas de su proceso y solo ellas pueden decir si retirarán el caso», alegó.
Asimismo, profundizó sobre lo que hicieron los delegados de Guaidó en la gira por EEUU y Europa. «Nuestro objeto fue fortalecer el apoyo de este proceso de pendulación que está pronto a cerrarse y luego conocer de su propia vez qué tratamiento en la mesa de negociación, debe dárse a las sanciones y todos coinciden en que solo se podrán levantar si hay resultados, no antes».
Fase de pendulación
Blyde recordó que desde hace mucho tiempo se planteó que la salida a la crisis pasa por una negociación, y «no por el quiebre del régimen, ni un golpe militar. Lo dijimos cuando el régimen se levantó de las negociaciones en Barbados».
«Estas negociaciones empezaron hace unos meses, en una fase de exploración le pedimos a los noruegos, creadores de la Plataforma Unitaria- que exploraran si había posibilidades de lograr una negociación para un acuerdo que es el fin, pero el régimen lo ha usado para decir «soy un negociador», pero nunca ha tenido la intención real de lograr un acuerdo político», criticó.
Según dijo ahora están en la fase de pendulación donde las partes no se sientan frente a frente, sino que los noruegos están facilitando el proceso y agradeció a los noruegos por ser de gran ayuda en el proceso: «no andan declarando porque muchos lo buscan para protagonizar, sino buscar una salida. Le agradezco a esta delegación que ha venido varias veces al país este año para avanzar en el proceso de pendulación».
«Se está negociando la agenda sobre la cual se discutirá para llegar a un acuerdo, también se explora la intención de las partes de verdad de llegar a un acuerdo y que a raíz de esto pueda solventarse el conflicto y renacer económicamente».
Además, descartó que el tema de la ayuda humanitaria sea objeto de discusión durante esta fase. «Cuando un país no se puede poner de acuerdo hay que buscar terceros que nos ayuden. Yo no tengo autorización para revelar la agenda que ha sido negociada en la pendulación, pero la gente puede intuir de que se trata», estimó.
Asimismo, Blyde manifestó «estar conforme» con lo que se ha acordado, pero no «con la velocidad que ha avanzado el régimen porque el país necesita mucha más urgencia del tiempo que se ha tomado».
Más robusto que los anteriores
Al ser consultado sobre qué tiene de diferente este proceso con los anteriores, Blyde declaró que es mucho más robusto porque tiene mucho más que la carta de las sanciones.
«Nadie garantiza el éxito de un proceso de negociación, pero es indispensable que la Plataforma Unitaria conformada por la mayoría de los líderes y partidos, la sociedad civil y factores económicos, sociales de la sociedad civil organizada tenga la mayor cantidad de actores posibles porque eso le hace más díficil a ambas partes salirse del acuerdo».
«Este proceso es más robusto que cualquier otro proceso de negociación anterior. El venezolano está tan harto que «siéntense a negociar» es un grito desesperado», aseguró. «Además, tenemos el apoyo de la comunidad internacional democrática completa y ojalá los países que apoyan al régimen procuren la estabilidad de Venezuela y una salida democrática».