Bachelet actualizó informe sobre Venezuela sin exigir liberación del equipo de FundaRedes

La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, se refirió este lunes 5 de julio acerca de la situación de las violaciones de derechos humanos en el país en el marco de la 47° sesión del órgano internacional.

Durante su intervención, Bachelet señaló que su oficina registró un total de 97 incidentes contra defensores de derechos humanos, cuya persecución, hostigamiento y criminalización se agudizaron desde que comenzó el año  e instó a que se liberen las personas detenidas arbitrariamente.

Expresó su “preocupación” por la detención arbitraria del equipo de Fundaredes, aunque no exigió la liberación inmediata del director de la organización, Javier Tarazona, así como tampoco de sus dos activistas, Rafael Tarazona y Omar de Dios García, los tres detenidos el viernes 2 de julio por efectivos de seguridad del Estado y presentados en tribunales el sábado 3 de julio con imputación de los delitos “traición a la patria”, “terrorismo” e “instigación al odio”.

Bachelet indicó que reiteró su compromiso para seguir ofreciendo apoyo al país para que se respeten los derechos humanos. «Continúan las protestas sociales, ante un acceso cada vez más difícil a los servicios básicos», destacó. Aunque saludó que la tendencia de las víctimas fatales en el contexto de las protestas haya bajado, resaltó: «Una sola muerte ya es demasiado», dijo.

En ese sentido, señaló que es importante que se continúen con los procesos judiciales sobre rendición de cuentas por las muertes acaecidas durante las protestas registradas en los últimos años.

También aprovechó la ocasión para anunciar que en el mes de septiembre presentará un reporte “complementario” acerca de la crisis venezolana y confía en que pronto se podrá avanzar hacia que se establezca una oficina con sede en Venezuela.

Entre las medidas anunciadas en los últimos meses por el régimen, saludó la reforma policial como una «ocasión hacia un cambio sostenible» y una «oportunidad para mejorar los mecanismos de supervisión y rendición de cuentas», así como la promesa de cerrar los centros de detención administrados por las fuerzas de seguridad acusadas de violaciones a los derechos humanos.

«La oficina Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) continuó recibiendo denuncias creíbles de tortura o tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes. Recibió algunos informes de golpizas, descargas eléctricas, violencia sexual y amenazas de violación. El ACNUDH no tiene conocimiento de ninguna acción emprendida por la Comisión Nacional para la Prevención de la Tortura entre el 1 de junio de 2020 y el 30 de abril de 2021», expresa una parte del informe.

La ACNUDH denunció la violación sistemática de los derechos de las personas acusadas a la libertad, a un juicio sin dilaciones indebidas, a un juicio imparcial y a la asistencia jurídica. En el informe documentan al menos 12 casos en lo que se detuvo a personas sin que se presentara una orden de detención y en ausencia de flagrancia.

En el informe también se denuncia la precaria situación en los centros de reclusión en donde los detenidos son mal alimentados y tiene restricciones para recibir visitas por parte de familiares. Además, la ACNUDH se muestra preocupada por las muertes bajo custodia, especialmente debido a la elevada incidencia de la tuberculosis, la malnutrición y otras enfermedades entre las personas privadas de libertad.

Puede leer el informe completo aquí: Michelle_Bachelet_informe_5jul2021