Alejandro Grisanti: Nos vamos a estabilizar pero como el segundo país más pobre del hemisferio
El economista y socio de la firma Ecoanalítica, Alejandro Grisanti, aseguró que el PIB en Venezuela no seguirá cayendo por lo que queda de año, y que mientras no haya un cambio político ni consenso, «nos vamos a estabilizar como el segundo país más pobre del hemisferio, después de Haití».En entrevista realizada por La Prensa de Lara, Grisanti señaló que existe muy poca capacidad para construir riqueza, aunque algunos sectores como salud, alimentos y comercio hayan presentado márgenes de crecimiento durante el contexto actual.
El economista señaló la crisis económica no tiene relación con la pandemia, aunque se acentuó desde 2020. Cuando Nicolás Maduro asumió el poder en el año 2013, hubo una fuerte caída del Producto Interno Bruto, «una caída que no ha sido comparable en el hemisferio occidental. Nunca ha habido una caída de estas magnitudes con una hiperinflación. Entonces, creo que el único responsable es Maduro, el régimen, su equipo que lo ha destruido todo», dijo.
A su juicio, para que Venezuela se vuelva a recuperar económicamente necesitará al menos unos 36 años para recuperar los «9 años de Maduro en el poder» y esto lo asegura porque la destrucción de la actual gestión ha sido «más rápida» y «sin precedente» porque hubo un arrase de muchas empresas y también de la capacidad productiva de Petróleos de Venezuela.
«Cuando vemos la caída muy profunda que tuvo Venezuela, y nosotros a esa caída le asignamos las tasas de crecimiento impresionante que cumple Venezuela en 1920 hasta finales de la década de los 70, nosotros lo que proyectamos es que para llegar a los niveles estándar de vida a los niveles de producción por habitante que tuvimos en el 2012, vamos a requerir de 36 años. Es decir, en 2050 o 2060 alcanzamos el nivel óptimo», expresó.
En el mes de marzo, la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras) y el oficialista Jorge Rodríguez, sostuvieron un diálogo para establecer beneficios económicos para todos los venezolanos. Sin embargo, hasta ahora no ha habido avances. Ante ello, Grisanti señala que la administración de Nicolás Maduro se ha hecho «la vista gorda con el régimen de controles de precios, que no está aplicando los controles de cambio, que tiene una economía de puertos abiertos para que el sector privado de alguna manera importe y mejore la oferta de bienes y servicios que se vienen dando, pero esos cambios no se están haciendo por convicción, sino por la coyuntura del país. Esa flexibilización ha hecho que algunos sectores crezcan en los últimos tres años, como salud, alimento, comercio, telecomunicaciones, artículos de higiene personal, porque se han encontrado con un ambiente más pragmático del gobierno. A esos sectores se les ha recomendado que tengan cuidado, puesto que el hacha de los controles no ha sido eliminada», comentó.
Grisanti destaca que todo el sector productivo, entre esos metalmecánica, manufactura, transporte, registran grandes pérdidas durante la pandemia y que si no se crea un consenso, será imposible la estabilización, pero subraya que ha habido cambios «fuertes» en los actores económicos, por ejemplo: el sector privado está mejor que el sector público y señaló que en el año 2012 el sector público era «inmensamente más rico porque era el principal productor petrolero, y el que tenía más acceso a divisas», y señala que aunque actualmente no se puede afirmar que el sector privado es el más rico, sí es al menos el que le ha brindado estabilidad y mejoras salariales a sus trabajadores.
Adicional a esto, el representante de Ecoanalítica, afirma que la hiperinflación de este 2021 cerrará en 3.000% y que los precios de los productos se multiplicarán por 30, con una caída de 1 o 2% del PIB. «En la medida que el Estado ha perdido su capacidad de recaudación, ha destruido por una lado la producción petrolera y la hiperinflación se viene comiendo las posibilidades de recaudación interna del Seniat, el Gobierno va a seguir emitiendo bolívares para poder reducir esos gastos. La única manera que tiene Maduro de poderle pagar a los doctores, a los maestros, a los policías es emitiendo bolívares y es por eso que no somos positivos en que se vaya a detener la hiperinflación», señaló.
Ante la posible reconversión monetaria, presuntamente para el próximo mes de agosto, la cual sería la tercera reducción de ceros en trece años, Grisanti dice que mientras que Maduro esté en el poder, cada dos años deberán hacerse reconversiones monetarias y coincide con otros especialistas en economía en que la reconversión solo simplificará las transacciones financieras y que no colapsarán los métodos de pago y aunque habrá temas de redondeos «que causan presión hacia el alza de la inflación», al final no habrá cambios profundos «sin una agenda económica clara que cree confianza, que permita acceder a financiamiento internacional», culminó.