No son nuevas las celebraciones de bodas, 15 años y electrónicas en Tocorón, Puente Ayala y otras cárceles
La semana pasada en el cumpleaños de alias el «Chichi» hubo cervezas, cócteles, torta y hasta parrilla. El privado de libertad disfrutó dos días seguidos de la «parranda» que tuvo lugar en los calabozos del Comando General de la Policía del estado Lara. Pero esto no es nada nuevo porque bodas, 15 años y todo tipo de fiestas son constantes en las diferentes cárceles del país.
En los últimos 5 años, los calabozos policiales de Polilara son los que más denuncia e irregularidades han tenido no solo por pase de presuntas sustancias estupefacientes, sino también por pernoctas de mujeres y fiestas, reportó La Prensa Lara. «La semana pasada, alias el «Chichi», un privado de libertad, presuntamente, celebró su cumpleaños dentro de los calabozos del Comando General de la Policía del estado Lara, según denunciaron vecinos de las comunidades adyacentes, ubicada en la calle 30 de Barquisimeto».
El sábado 12 de junio comenzó la «parranda», vecinos detallaron que la música se escuchaba a alto volumen que no los dejaba dormir. «La rumba estuvo prendida hasta la 4:00 de la mañana del domingo», comentaron los vecinos, quienes no quisieron identificarse.
Diosdado Cabello dijo este miércoles que el Gobierno «ha descubierto» casos de corrupción judicial y anunció que los mismos comenzarán a ser atendidos. «Esto es parte de la crítica y autocrítica nuestra, hemos descubierto niveles de corrupción judicial que hay que atender (…) se han dolarizado servicios que deberían ser gratuitos», expresó en su programa Con el Mazo Dando.
Cabello es el presidente de la comisión que hará una «revolución judicial», según Nicolás Maduro; y aseveró que prevé arrancar este viernes la visita «por todos los recintos -penitenciarios- provisionales del país».
Para el abogado Carlos Nieto Palma, coordinador general de Una Ventana a la Libertad, el pranato de los penales «se está instalando en los calabozos policiales y se están convirtiendo en las nuevas cárceles del país».
«Los detenidos en calabozos policiales están copiando las mafias carcelarias de penales de Lara y otros estados. Siempre lo he dicho, que en las mafias carcelarias no son los presos, allí también entran los funcionarios de seguridad y terminan siendo parte de la corrupción», comentó al medio regional.
Bajo la sombra de la corrupción en estos centros de detención hay fiestas y pernoctas de mujeres y familiares lo que pone en peligro la seguridad de los reos y estas personas que acuden a las celebraciones.
En enero el descontento por el pago de la «causa» -impuesto exigido por los pranes a los reclusos para que puedan gozar de ciertos beneficios- generó un motín en el Centro Penitenciario David Viloria conocido como «Uribana» que terminó con un reo muerto y al menos 10 heridos.
Los privados debían cancelar a los pranes de cada módulo 1 dólar por semana por concepto de la «causa», familiares denunciaron que de no cancelar son castigados, golpeados y aislados. Pero no sólo piden dinero por comida y celulares, familiares denunciaron que un grupo de reclusos que se hace llamar los «Trabajadores» de Uribana, impusieron una tarifa para los privados de libertad que desean una visita conyugal de hasta 50 dólares.
Por todo lo alto
En los penales abiertos se celebran grandes fiestas no sólo de cumpleaños, también bodas y hasta discotecas como el caso de Tocorón. Uno de los casos más recientes, fue la celebración de los 15 años de la hija del pran de la cárcel de Puente Ayala, Anzoátegui.
«Desde hace muchos años hemos visto la celebración de matrimonios, quince años, además de la existencia de discotecas en pleno funcionamiento en varias cárceles del país, organizadas y controladas por los pranes y sus equipos», comentó Nieto.
A principios de marzo, con música en vivo, lujosa decoración y extrema seguridad se celebraron los 15 años de la hija de Junior Yeguez, alias «Pata de Queso», pran del Internado Judicial José Antonio Anzoátegui.