En Venezuela, la educación tiene cero en la boleta
Yelitza Figueroa | 1 jun 2021. Hablar de una educación de calidad a todos los niveles y que sea garante de la seguridad y bienestar para la totalidad de los que forman parte de ella es algo que parece irreal en la Venezuela actual.
La crisis existente no sólo abarca los salarios del personal docente, administrativo y obrero sino que también incluye el deterioro de las instituciones, que a decir de Luis Arroyo, presidente del Colegio de Profesores del Estado Lara, alcanza un 90% de las mismas, ya que se encuentran en total abandono por la desidia y falta de políticas acertadas del gobierno de Nicolás Maduro.
Aparte de esto, también destacó que ninguna de las instituciones cuenta con los recursos para garantizar la salud de los que hacen vida en ellas, ya que no tienen presupuesto para cubrir las medidas de bioseguridad primordiales y obligatorias dada la pandemia que aún persiste en el planeta.
Afectados directos se sienten desamparados y en el olvido
Para nadie es un secreto que los sueldos y salarios que devengan los docentes es insignificante comparado con la hiperinflación que desde hace algunos años atraviesa el país, razón esta por la cual algunos profesionales de la educación se han visto comprometido en seguir impartiendo clases aun cuando las condiciones no son las óptimas ya que hasta los demás beneficios, como el HCM, fueron eliminados, todo esto según afirmó la profesora Liliana Yépez.
Los alumnos por su parte pese a todos los obstáculos que actualmente enfrenta, como la precaria alimentación, transporte y conectividad a internet, ellos continuarán esforzándose en culminar sus estudios porque quieren ser profesionales. Para ello Dariannis Escobar, dirigente estudiantil de la UNEXPO, se refirió al tema de la salud y exigió que el gobierno realice una “vacunación gratuita y masiva para todos”. “Si no hay profesionales, no hay futuro” aseveró.
Con todo este panorama los educadores no ven con buenos ojos el futuro de la calidad de los profesionales que actualmente se están formando, ya que con todas las trabas y la poca disposición de mejora por parte de gobierno al no aprobar y asignar presupuestos suficientes y acordes a la realidad del país, así como la reparación y mantenimiento de las instituciones, el panorama parece desalentador y preocupante.