Cristiana Chamorro y Jeanine Añez: el silencio del feminismo comunista
Ordenó el pernicioso foro de Sao Paulo incendiar América Latina. Ya se anunció con antelación y está comprobado y ejecutado. Ese mandamiento precisó que en esta actividad desestabilizadora participaran con fuerza los colectivos feministas, como en efecto lo hicieron en Chile, Colombia y hasta en los Estados Unidos.
El régimen de los Ortega en Nicaragua ha desatado una ofensiva feroz contra el pueblo, particularmente contra las mujeres, siendo esta vez la periodista Cristiana Chamorro la principal víctima, pero no la única. El régimen se especializa en las mujeres y además que sean periodistas.
Pero lo que quiero resaltar es el silencio cómplice de las feministas comunistas ante este atentado, no solo contra las mujeres, sino contra el Estado de Derecho, copiando el mismo guion de otro sátrapa como Evo Morales que personalmente envía esbirros a las mazmorras a torturar a la expresidenta Jeanine Añez, también encarcelada por los coyotes terroristas.
Tampoco hay pronunciamiento ante el atentado vil contra las mujeres venezolanas sometidas a todo tipo de discriminación y vejamen. Las mujeres cubanas masacradas por Castro y sus bufones en el poder.
Cristiana Chamorro ha dedicado su vida a proteger la libertad de expresión, a la defensa de las mujeres y de los hombres, masacrados por Daniel Ortega y donde juega papel importante su esposa, Rosario Murillo, zahorí, no de escoba, sino de machete en mano, para degollar a todo aquel que siquiera piense en la palabra libertad.
El Cartel de Sao Paulo y Puebla financian actividades terroristas, asesinando líderes. – mujeres y hombres- y falsamente enarbolan banderas como el feminismo, mal entendido y manipulado, para proseguir en su campaña de desestabilización continental.
Los Ortega y sus nigromantes le tienen pavor a una mujer formada, inteligente, educada, la cual necesitan inhabilitar temiendo una derrota aplastante, como sucedió con la madre de la hoy torturada y vejada. La señora Violeta Barrios de Chamorro derrotó a Ortega y ejerció democráticamente la presidencia.
La cartilla es la misma en todos los países bajo su égida: inventar delitos, inhabilitar políticamente y robarse los partidos democráticos. Con toda la siniestralidad del caso, no importa quien sea, baste que les amenace sus privilegios para perseguirle y hasta asesinarle. La vida de Cristiana Chamorro hoy corre peligro, al igual que la de Jeanine Añez, a las órdenes del cocainómano principal.
En estos regímenes el poder y la violencia es ejercida por igual contra las mujeres y los hombres. Es falso que estos monstruos defiendan algún postulado teórico. El foro de Sao Paulo es una rebatiña para aprovecharse del tráfico de droga y del terrorismo. No importa a quien subyuguen. Estos países han caído en una trampa mortal, bajo el engaño de muchas banderas y una de ellas es el falso feminismo, escondido en una máscara indeseable.
El mundo democrático debe actuar ante la masacre moral y política contra la señora Chamorro y la expresidenta Añez. Quedan descubiertas las posturas feministas del comunismo: es un caperuzo para salvaguardar la opresión que inflige – eso que llaman el socialismo del siglo XXI.