Consultores 21: El Estado esquiva hablar de datos oficiales de migración porque no tiene o no quiere darlos
A raíz de las recientes declaraciones de Antonio Guterres, secretario general de la ONU, en las que señala que la crisis migratoria venezolana está en un momento crítico tras el aumento de la xenofobia contra los venezolanos que viajan a otras regiones huyendo de la situación política-económica por la que atraviesa el país, el director de Consultores 21, Saúl Cabrera afirmó que el número de caminantes va en aumento, «en la actualidad no sabemos cuanto, tratamos de buscar una cifra pero es una cifra esquiva porque Venezuela no tiene o no quiere dar los datos oficiales de la gente que ha salido del país» asumiendo que debe estar alrededor de 6 millones de personas «y es mucho».
Cabrera afirma en Unión Radio, que la gente migra por el tema político, porque impide que el ciudadano logre lo que anhela; y desde 1.998 hasta la fecha, la arista política que al principio era clara, pues «la gente que empezó a migrar principalmente eran las clases altas, pero ahora por el mal manejo de las políticas económicas, expropiaciones, el cierre de empresas, etc., esa vena política de principio que tenía la migración hizo que se desarrollara una migración económica», es decir que la gente no le gustaba la política y pero tampoco le gustaba la situación económica que tenía y por eso comenzó a migrar.
«Si en algún momento la migración fue representada por la escultura de Cruz Diez en Maiquetía, pues la gente se iba del país por el aeropuerto Simón Bolívar, en los últimos años se desdibujó y en realidad ahora son las trochas o la salida por la aduana de Cúcuta, de San Antonio lo que representaba la migración» afirmó.
Por otro lado, el director de Consultores 21 se pasea por la sociología de quienes están viajando ahora, argumentando que la mayoría de los migrantes son adultos y de esas personas, la mayor parte son hombres adultos que salen para tratar de generar ingresos para poder mantener a sus familias en Venezuela.
«Esa migración se esperaría, aunque tampoco se tienen cifras claras de que esa migración, como pasa con otros países centroamericanos como República Dominicana o México que va a EEUU y que buena parte del producto interno de los países lo constituye esa ayuda que los migrantes dan a sus familias en sus países» destacó Cabrera.
Además acotó que en el caso de Venezuela, la pandemia ha complicado un poco la situación porque si de por si el migrar es muy complicado, pues la gente tiene que tomar una decisión de vida «porque no es sencillo dejar todos sus afectos y su vida, para tratar de buscar una nueva vida pero si le anexamos más la pandemia es mucho más complicado».
En cuanto a la actual situación política que conlleva la toma de conciencia de los venezolanos, que para mejorar su condición de vida se debe y que las acciones que realizan organismos internacionales y demás países para atender la crisis venezolana, muchos están conscientes de que el escenario ideal para detener la migración es cuando se ofrezcan condiciones distintas, que deberían pasar por un cambio político, y este cambio político deberían pasar por, como lo solicitan actores ciudadanos, unas elecciones libres, justas y transparentes.
Sin embargo, Cabrera destacó que si pareciera claro por lo que se ve en las encuestas, pues la gente hasta hace 5 o 6 años no hacía la conexión entre la economía y la política, «ahora comienza a darse cuenta de que la economía por lo menos en nuestro país dependía mucho de la política y empezó a pensar que para lograr que la economía mejore que es lo que en realidad a la gente le interesa y no es la macro economía, sino su economía familiar; como el puede desarrollar a su familia, tener un empleo estable, hacer vacaciones, que los hijos se gradúen».
Ante ese escenario que muchos venezolanos han visto imposibilitados de realizar, asegura Cabrera, el ciudadano empezó a darse cuenta que si no cambiaba la política y la economía no iba a cambiar nada «y una premisa frente a la situación política que tenemos es que tendría que haber entonces un cambio de gobierno, pero ese cambio de gobierno sigue entendiendo la gente que debe ser con elecciones y lo que la gente aspiraría es unas elecciones medianamente competitivas, es decir que haya posibilidad real de que mi voto valga lo que valen los votos en la democracia», es decir argumentó que si hay una mayoría que quiere algo, esa mayoría se expresa y precisamente esa expresión sea un resultado electoral que acaten todos los actores.