León Arismendi, rector suplente: «No es cierto que los votos entran de un color y salen de otro»
Uno de los rectores suplentes del Consejo Nacional Electoral (CNE), León Arismendi, considera que la transparencia es un factor clave para cambiar los señalamientos que pesan sobre el Poder Electoral y todos sus procedimientos.
A través de una entrevista ofrecida a TalCual, el abogado, señaló que es necesario hacer un «esfuerzo por comunicar al país» que el CNE le pertenece a toda la población venezolana, con el hincapié que es un «ente que se ocupa no solo del voto sino del registro civil es creíble, que es manejado con imparcialidad y que sus trámites son transparentes», dijo.
León piensa que una de las tareas es hacer evidente que «no es cierto que los votos entran de un color y salen de otro, que se le asignan a quien no es o que el voto no es secreto», expresó y agregó que es necesario la evaluación de temas en donde puedan ser incluidos todos los sectores políticos de ambos bandos.
En ese sentido, piensa que con la victoria alcanzada por la oposición el 6 de diciembre de 2015, se instaló una pugna la cual se mantiene hasta la fecha y a medida que ha pasado el tiempo, ha aumentado la confrontación política y la gestión del CNE fue puesta en cuestionamiento.
El abogado en derecho laboral afirmó que de darse una jornada electoral para unas votaciones primarias, de acuerdo a la propuesta de voceros de la oposición, estas serían apoyadas por el CNE «en la medida de lo posible, pero las organizaciones políticas pueden efectivamente hacerlas y son ellas quienes deben realizarlas. Es responsabilidad de las propias organizaciones políticas. Quizás el CNE podría apoyar con las máquinas de votación si es que se le solicita», expresó.
Confianza de los electores
El rector suplente considera que no es una tarea fácil recobrar la confianza de los electores. Señala que es una labor que debe involucrar a todos los actores políticos junto a un concurso donde se sumen todas las voluntades en «una misma dirección» porque el país tiene dos décadas en un confrontamiento político del cual no ha habido solución y que en la medida en que los diferentes partidos habían decidido caminar por la vía electoral, «el conflicto sobre si se cambiaban los votos o el resultado en el sistema automatizado se iba disipando porque había comunidad de propósito, en el sentido de que los partidos estaban interesados en construirse, en hacer campaña, en hacer lo que hace el activismo pensando: que era posible acceder al poder por la vía electoral, desde el 2006 a 2015 fue un largo recorrido que dio el resultado que tuvo», puntualizó.