CU: Familiares envían dinero desde Venezuela al exterior por la pandemia
Grupos familiares enteros han sido perjudicados por la crisis económica de los últimos siete años. Sin embargo, la aparición del covid-19 empeoró las condiciones de los migrantes y perjudicó las vías que existían para ganarse la vida en otros países. De lado y lado, los familiares intentan socorrerse ante la prolongada recesión en Venezuela y ahora también por la pandemia.
Conie Cortez es músico, el año pasado decidió irse a Medellín en busca de trabajo, pero la pandemia obligó a los países a confinarse y las actividades quedaron estancadas. Conie dice que en condiciones normales ya es difícil trabajar como músico, así que luego de semanas sin conseguir empleo su mamá decidió ayudarla desde Venezuela.
Teresa Cortez tiene 68 años y cuenta que la pensión no alcanza para comprar “ni una papeleta de comino”, pero gracias a una finca familiar pudo auxiliar a su hija Conie. “Gracias a Dios que la familia tiene su entrada por una finquita, podemos arrendarla, tenemos un poquito de arroz y de ganado, de eso nos mantenemos la familia”, dice.
América Latina y el Caribe es una de las regiones más afectadas por la pandemia. La crisis sanitaria provocó un aumento en el desempleo y mayor deterioro en los niveles de pobreza y desigualdad, de acuerdo con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Los salarios afectados por una prolongada hiperinflación que transita su cuarto año –y la disminución de los sectores productivos– hacen que cualquier ayuda que salga desde Venezuela luzca imposible. La economista Nathaly Oronoz explica que algunas personas han logrado obtener ingresos en divisas los últimos años a raíz de una dolarización de facto permitida por las autoridades.
También hay quienes mantienen varios trabajos a la vez, lo que hace que puedan ayudar a familiares en el exterior. No obstante, recuerda Oronoz que no es el caso de la mayoría cuyos salarios mensuales, en promedio, se ubican en $4,7 en el sector público y $70,1 en el sector privado, mientras que la canasta alimentaria cuesta alrededor de $250 al mes.