Presidente de Plus Ultra: Air Europa también negoció con Maduro y no pasó nada
El presidente de Plus Ultra, Fernando García Manso se defendió de las constantes críticas que ha recibido la empresa tras haber sido rescatada por el Consejo de Ministros y por la relación que tienen algunos de sus accionistas con el madurismo y aseveró que Air Europa también negoció con Maduro y no pasó nada.
En entrevista exclusiva concedida a Vózpopuli, el empresario respondió más de una decena de interrogantes sobre el rescate y el escándalo que han enfrentado durante los últimos meses.
– Ustedes señalan que el rescate de Plus Ultra con 53 millones es necesario para evitar un monopolio en la ruta Madrid-Caracas. Sin embargo, Iberia y Air Europa aseguran que actualmente no pueden volar a Venezuela porque el espacio aéreo sigue cerrado, mientras que ustedes sí tienen el permiso del Gobierno venezolano. ¿A qué se debe esta distinción?
– En primer lugar, lo que hemos querido decir es que no tiene lógica que no se le dé importancia al hecho de que si desaparecemos habrá un monopolio en la ruta a Caracas, perjudicando gravemente a los miles de usuarios que la utilizan cada año y se le esté dando tanta importancia al hecho de que, supuestamente, estemos volando en forma de monopolio durante unas semanas en esa ruta. Y digo supuestamente porque no es cierto.
Desde que se cerró el espacio aéreo en marzo de 2020, Iberia ha realizado, al menos, tres vuelos y Air Europa cinco, fundamentalmente concentrados en los meses de verano y navidades. Por lo que respecta a 2021, en enero volamos a Caracas Iberia y Plus Ultra, con un vuelo cada una. En febrero, Air Europa ha sido la única compañía que operó vuelos en exclusiva a Venezuela, ni Iberia ni Plus Ultra Líneas Aéreas lo hicieron.
En marzo, Plus Ultra fue la única que operó un vuelo a ese país, pero Iberia tiene programados y anunciados vuelos a Caracas para los días 24 de abril y 23 mayo, al igual que Air Europa tiene un vuelo previsto a Caracas para el día 13 de mayo. Como ve, a lo largo de la pandemia estamos volando a Latinoamérica las tres compañías. La acusación de monopolio no tiene ningún fundamento.
– ¿Cómo puede usted decir que no tienen conexión si dos de los mayores accionistas de Plus Ultra, Reyes y El Arigie, comparten en España dos sociedades de importación y exportación de café con Ibrahim que se crearon entre 2018 y 2020?
– Las relaciones personales o profesionales que puedan tener los accionistas con otros empresarios más allá de lo que compete a la propia aerolínea no es una cuestión que deba entrar en debate alguno por nuestra parte.
En cualquier caso, si yo le digo que hemos firmado un acuerdo con el Gobierno de Nicolás Maduro para “fortalecer el turismo de motor enmarcado en la Agenda económica bolivariana”, y que este acuerdo contempla un pacto con la aerolínea estatal Conviasa, inversiones en hoteles, apoyo a la criptomoneda venezolana petro (perseguida por EEUU) y una inversión de la administración en algunos de los aeropuertos internacionales de Venezuela, seguramente el escándalo sería mayúsculo.
Ahora bien, si este acuerdo lo negoció otra gran aerolínea española, tal y como anunció personalmente en 2018 el vicepresidente del área económica del Gobierno venezolano, Tareck El Aissami -lo que fue publicado por algunos medios-, no pasa nada….
Es notorio el trato injusto y discriminatorio al que nos estamos viendo sometidos. Se nos está utilizando como arma arrojadiza en una batalla política en la que nada tenemos que ver. Somos una compañía absolutamente apolítica, sin vinculación ideológica ni de otra índole con los gobiernos de los países a los que volamos.
García Manso es Ingeniero en Telecomunicaciones. Antes de llegar a Plus Ultra, fue Director General para México y Vicepresidente para América Latina de la constructora de líneas ferroviarias Alstom Transporte (1995-2001); responsable de la integración de la madrileña Amena en la semipública France Telecom (en 2005), y Director de Recursos del asturiano Grupo Auna (2001-2006).
Ahora está en el centro de la polémica por ser el presidente de Plus Ultra, la segunda aerolínea rescatada por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) después de Air Europa, pese a no haber registrado beneficios en ningún ejercicio desde su fundación en 2011, representar el 0,03% del tráfico aéreo en España y estar al borde de la disolución antes de la crisis del coronavirus.