EEUU pausará vacunación con J&J para analizar 6 casos de coágulos en 6.8 millones
Washington, 13 abr (EFE).- La Casa Blanca aseguró este martes que la pausa en la vacunación con el inyectable de la farmacéutica Johnson & Johnson, conocida también por el nombre de su filial Janssen, no tendrá un «impacto significativo» en su estrategia para inocular contra la covid-19 a la población de Estados Unidos.
El Gobierno estadounidense está trabajando con las autoridades estatales y locales del país para «que a cualquiera que tuviera cita para una vacuna de J&J se le dé rápidamente otra cita para recibir la de Pfizer o la de Moderna», añadió en un comunicado Jeff Zients, el coordinador de la respuesta de la Casa Blanca contra el coronavirus.
Zients reaccionaba así a la recomendación de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) y la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) de que se suspenda el uso en el país de la vacuna de Johnson & Johnson, tras haber registrado seis casos de un tipo de coágulo sanguíneo «raro y grave».
«Este anuncio no tendrá un impacto significativo en nuestro plan de vacunación», subrayó el responsable estadounidense.
Añadió que las vacunas de Johnson & Johnson apenas representan «menos del 5 % de las administradas en Estados Unidos», y que el Gobierno federal ya se ha asegurado «dosis suficientes de Pfizer y Moderna para 300 millones de estadounidenses».
En Estados Unidos viven unos 255 millones de adultos, de los cuales más del 28 % ya están completamente vacunados, de acuerdo con los CDC.
Los suministros de Pfizer y Moderna, las únicas otras dos vacunas contra la covid-19 aprobadas para su uso de emergencia en Estados Unidos, «son más que suficientes» para mantener el ritmo actual de 3 millones de dosis puestas al día, prometió Zients.
También permitirán cumplir la promesa del presidente estadounidense, Joe Biden, de que se habrán administrado 200 millones de dosis cuando él cumpla 100 días en el poder, a finales de abril, añadió.
El anuncio de la FDA y los CDC significa que todos los canales de salud federales (lugares de vacunación masiva, centros de salud comunitarios y similares) que administraban anteriormente la vacuna de Johnson & Johnson tendrán que detener el proceso por el momento, según un funcionario federal de salud, informa la cadena CNN.
Las agencias recomiendan que los estados hagan lo mismo, pero dependerá de cada uno de ellos tomar esa decisión.
La pausa cautelar se debe a la detección de un tipo de coágulos en sangre que no figuran en la lista de posibles efectos secundarios adversos que formaban parte de la autorización de uso de emergencia para J&J por Estados Unidos.
Los seis casos registrados son mujeres con edades entre los 18 y los 48 años, y sus síntomas se produjeron entre seis y trece días después de la vacunación.
Tras el anuncio de las agencias estadounidenses, Johnson & Johnson anunció este martes que retrasará el reparto de su vacuna contra la covid-19 en Europa. EFE
Más temprano
Las autoridades estadounidenses pidieron el martes una pausa inmediata en el uso de la vacuna de Johnson & Johnson, luego de que seis receptores desarrollaron complicaciones vinculadas con coágulos de sangre dentro de las dos semanas posteriores a la vacunación.
Según indica The New York Times, los seis beneficiarios eran mujeres de entre 18 y 48 años. Una mujer murió y una segunda mujer en Nebraska ha sido hospitalizada en estado crítico.
Casi siete millones de personas en los Estados Unidos han recibido inyecciones de Johnson & Johnson hasta ahora, y aproximadamente nueve millones más de dosis se han enviado a los estados, según datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
«Recomendamos una pausa en el uso de esta vacuna por precaución», indicó el Dr. Peter Marks, director del Centro de Evaluación e Investigación Biológica de la Administración de Alimentos y Medicamentos, y la Dra. Anne Schuchat, subdirectora principal de la CDC, que expresa que «en este momento, estos eventos adversos parecen ser extremadamente raros».
Los científicos de la FDA y los CDC examinarán conjuntamente los posibles vínculos entre la vacuna y el trastorno y determinarán si la FDA debe continuar autorizando el uso de la vacuna para todos los adultos o limitar la autorización. Se ha programado una reunión de emergencia del comité asesor externo de los CDC para el miércoles.
La medida podría complicar sustancialmente los esfuerzos de vacunación de la nación en un momento en que muchos estados se enfrentan a un aumento de nuevos casos y buscan abordar las dudas sobre las vacunas. Los reguladores en Europa y en otros lugares están preocupados por un problema similar con otra vacuna contra el coronavirus, desarrollada por investigadores de AstraZeneca y la Universidad de Oxford. Esa preocupación ha provocado cierta resistencia a todas las vacunas, a pesar de que la versión de AstraZeneca no ha sido autorizada para uso de emergencia en los Estados Unidos.
La gran mayoría del suministro de vacunas del país proviene de otros dos fabricantes, Pfizer-BioNTech y Moderna, que en conjunto administran más de 23 millones de dosis a la semana de sus vacunas de dos inyecciones. No ha habido preocupaciones de seguridad significativas sobre ninguna de esas vacunas.
Pero si bien los envíos de la vacuna Johnson & Johnson han sido mucho más limitados, la administración de Biden todavía contaba con el uso de cientos de miles de dosis cada semana. Además de requerir una sola dosis, la vacuna es más fácil de enviar y almacenar que las otras dos, que deben almacenarse a temperaturas extremadamente bajas.
No está claro hasta qué punto la pausa en el uso de la vacuna Johnson & Johnson retrasará los planes de la administración de Biden de entregar suficiente vacuna para poder inocular a todos los adultos en los Estados Unidos a fines de mayo.
A los funcionarios federales les preocupa que los médicos no estén capacitados para detectar el raro trastorno si los receptores de la vacuna desarrollan síntomas del mismo.
«Por lo general, se usa un medicamento anticoagulante llamado heparina para tratar los coágulos de sangre. En este contexto, la administración de heparina puede ser peligrosa y es necesario administrar tratamientos alternativos», dijo el comunicado.
En un comunicado de prensa, Johnson & Johnson dice que son «conscientes de que se han informado eventos tromboembólicos, incluidos aquellos con trombocitopenia, con las vacunas covid-19. En la actualidad, no se ha establecido una relación causal clara entre estos eventos raros y la vacuna Janssen covid-19».