Exclusiva ND | Daniels: Sojo y McKey podrían ser extraditados si se confirman delitos de abuso sexual a menores
El revuelo inició este fin de semana luego de que el excantante de Los Colores, Alejandro Sojo, pidiera disculpas públicas por haber tenido relaciones sexuales con una menor de edad (estrupo). Denuncias similares inundaron las redes sociales y este miércoles, el Ministerio Público/6D ordenó investigar los hechos contra Sojo, Tony Maestracci, el escritor Willy Mckey, y otros, según informó el fiscal general, Tarek William Saab en Twitter.
El abogado director de Acceso a la Justicia, Alí Daniels recordó a ND que, de confirmarse los testimonios y tratarse de un delito ocurrido en Venezuela, tanto Sojo como el escritor Willy Mckey, quienes viven en Argentina, podrían ser extraditados a Venezuela.
«Todo va a depender de que el fiscal (Saab) logré contactar a las víctimas», destacó Daniels.
Acotó que es determinante que las víctimas declaren ante la Fiscalía. «No sabemos si las victimas viven aquí, pero si es así será más fácil pedir una orden de extradición por Sojo y Mckey. El hecho de que no se trate de delitos políticos, y que el abuso sexual está contemplado como delito en las legislaciones de ambos países, permitirá que proceda la extradición».
Sin embargo, Daniels subrayó que ambos pudieran irse a un país donde no procede la extradición.
Daniel precisó que no hacen falta exámenes médicos para comprobar el abuso sexual. «Se puede hacer la denuncia con el testimonio de la víctima, si es coherente, si otros pueden confirmar que estuvieron en ese momento. Se puede construir un caso en base a un testimonio y más cuando son los mismos señalados quienes han confirmado los hechos. Lo más importante es el testimonio y dejar constancia en el expediente judicial de lo ocurrido».
Sobre la posible pena, Daniels indicó que la «pena del país que pide la extradición no puede ser mayor al que establece el país que envía a las personas».
Violación y acoso
El pasado fin de semana empezaron a publicarse en redes sociales varias denuncias contra Sojo, cantante de la banda de rock venezolano Los Colores, a quien se le acusa de haber tenido relaciones con menores siendo él mayor de edad. De inmediato, surgieron denuncias contra integrantes de bandas musicales como Tony Maestracci de Tomates Fritos, a quien se le acusó de abuso sexual, o contra el guitarrista del grupo Okills, Leonardo Jaramillo, por acoso a menores.
El baterista de la banda Le’Cinema, Daniel Landaeta, también fue acusado de abuso sexual. Le’Cinema anunció su disolución, mientras que bandas como Okills o Tomates Fritos informaron sobre la expulsión de sus integrantes señalados.
Algunos de los músicos han publicado comunicados en los que reconocen los hechos y manifiestan haber reflexionado sobre sus actos en el pasado y el comportamiento «machista».
Acto seguido, el escritor venezolano Willy Mckey publicó un comunicado en su cuenta de Instagram en el que también asume que cometió estupro en el pasado. «Debo reconocer que este episodio tuvo lugar en un momento en el cual yo era una figura pública y estaba en una relación formal con quien hasta hoy ha sido mi pareja», dijo Mckey en el comunicado, luego de que la víctima lo acusara creando una cuenta en Twitter bajo el anonimato.
El seudónimo que usó la víctima es «Pía» y dijo que todo pasó cuando tenía 16 años y él 36.
Este martes, Cecodap condenó estos hechos y exigió una investigación expedita frente a estas denuncias. «En los últimos días se han hecho públicos diversos testimonios de abuso sexual contra adolescentes cometidos por adultos vinculados al mundo de la música. En Cecodap expresamos nuestro rechazo rotundo a cualquier forma de violencia contra los niños, niñas y adolescentes. Como organización insistimos en tolerancia cero a cualquier forma de agresión sexual contra los adolescentes», sentenció el centro a través del documento publicado en su página web.
Cecodap destacó que en el Servicio de Atención Psicológica, Crecer sin Violencia han sido testigos de las secuelas del abuso sexual. Solo en 2020, 34% de los pacientes, que reportaron haber sido víctima de alguna forma de violencia, aseguraron que vivieron un episodio de abuso sexual infantil.